Ceres es el objeto más grande del Cinturón de Asteroides, ubicado entre Marte y Júpiter y que divide los planetas en interiores y exteriores. Localizado a 2,8 Unidades Astronómicas (UA) del Sol (unos 419 millones de kilómetros), es el principal remanente de la formación del Sistema Solar hace 4.600 millones de años. Además, esta región alberga una serie de cuerpos irregulares dispersos que no lograron constituir un planeta debido a las perturbaciones gravitacionales que produjo la formación del gigante Júpiter.

El Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la Nasa, confirmó ayer que la sonda Dawn (Amanecer) entró en la órbita de Ceres tras recibir un mensaje de la propia nave. Dawn es la primera sonda espacial en orbitar un planeta enano, algo que la Nasa también espera haga New Horizons, cuya llegada a Plutón se calcula para el 14 de julio.

"Desde su descubrimiento en 1801, Ceres fue conocido como un planeta, luego como un asteroide y, finalmente como un planeta enano. Ahora, tras una aventura de 4.900 millones de kilómetros que duró siete años y medio, Dawn puede llamar a Ceres su hogar", dijo Marc Rayman, jefe de la misión y director del JPL.

Con su arribo a Ceres, la sonda, que forma parte de las misiones Discovery de la agencia espacial, continúa con las tareas de observación que comenzó en 2011, tras su llegada al asteroide Vesta, segundo en tamaño tras el planeta enano y la primera parte de la misión.

La principal labor de Dawn es determinar la importancia del agua y tamaño en la evolución de los planetas. Para esto, la observación de cuerpos celestes primigenios, como Vesta y Ceres es fundamental, ya que permiten una mirada al amanecer del Sistema Solar y la formación planetaria.

La sonda busca entender la naturaleza de los bloques fundamentales que constituyen los planetas, además de contrastar cómo dos cuerpos celestes evolucionaron de forma tan distina. Mientras Ceres podría tener procesos hidrológicos activos, que incluye tener capas polares estacionales y hielo, Vesta es un asteroide seco y con rocas altamente magnetizadas, similares a las de Marte.

Destino final

Ceres toma su nombre de la diosa romana de la agricultura y, a pesar de ser muy pequeño, si se lo compara con los asteroides a su alrededor, es un gigante. Posee un diámetro de 974 kilómetros y una masa equivalente al 1% de la Luna, que lo convierte en el más pequeño de los planetas enanos reconocidos oficialmente. En esta categoría se encuentran también Plutón, Haumea, Eris y Makemake, todos ubicados más allá de la órbita de Neptuno.

Según los científicos a cargo de la misión, Carol Raymond y Robert Mase, Dawn usó un innovador sistema de propulsión, conocido como motor iónico, para cubrir eficientemente la distancia entre la Tierra y el Cinturón de Asteroides y luego entrar suavemente en la órbita de Ceres.