El escenario escogido para la petición de mano fue Kenia. Durante sus vacaciones en ese país africano, en octubre, el príncipe Guillermo de Inglaterra se comprometió para casarse con su novia de hace siete años, Kate Middleton. Pero sólo ayer su padre, el príncipe Carlos, anunció el enlace en la página de Facebook de la familia real inglesa. "El príncipe de Gales está encantado de anunciar el compromiso del príncipe Guillermo con Catherine Middleton", afirmó el comunicado, que dice que "la boda tendrá lugar en la primavera o el verano (boreales) de 2011 (es decir, en el segundo o tercer trimestre del próximo año), en Londres".

Así, Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono de Inglaterra, cumplirá lo que había afirmado hace algún tiempo, cuando dijo a un entrevistador que no se casaría "hasta que tenga por lo menos 28 años o quizás 30". El príncipe cumplió 28 años el 12 de junio (la misma edad de Kate, quien los cumplió en enero) y recientemente completó su entrenamiento en la Real Fuerza Aérea (RAF) como piloto de búsqueda y rescate.

"Somos muy felices juntos", declaró ayer la futura princesa y reina, al comparecer junto a su prometido ante la prensa. Felices y tomados del brazo respondieron preguntas en forma tímida, pero siempre sonrientes. Y en la mano izquierda, la joven lucía el anillo de compromiso, el mismo que en febrero de 1981 lució Diana Spencer -fallecida en 1997- al comprometerse con el príncipe Carlos. El anillo "es muy especial para mí y Kate es ahora muy especial para mí. Es la manera que tengo de asegurarme de que mi madre no se pierda un día como el de hoy; la emoción y la noticia de que vamos a estar juntos el resto de nuestra vida", declaró el joven. En una entrevista posterior con la cadena BBC, la pareja dijo que está muy ilusionada con el próximo enlace y aseguró que "ha sido un auténtico alivio y muy agradable poder contárselo a todo el mundo". Sobre la influencia de Lady Di en sus vidas, Kate afirmó que " ha sido una gran inspiración para mí", tras lo cual Guillermo dijo que "no espero que Kate ocupe los zapatos de mi madre, quiero que tenga su propio futuro".

El príncipe Carlos explicó que "tras el matrimonio, la pareja vivirá en el norte de Gales, donde el príncipe Guillermo seguirá sirviendo en la RAF" y que "se darán a conocer más detalles sobre el enlace a su debido tiempo".

Desde hace meses que se hablaba en Inglaterra que el anuncio de la boda se produciría de un momento a otro, y que el año 2011 era el más indicado, para no chocar con dos eventos importantes en 2012: los Juegos Olímpicos de Londres y los festejos por los 60 años del reinado de Isabel II. El matrimonio se producirá justo 30 años después de la boda de Carlos y Diana, el 29 de julio de 1981 en la Catedral de San Pablo. Esa fue, precisamente, la última vez que Inglaterra presenció la boda de un heredero al trono.

Los novios se conocieron en 2001 en la Universidad de Saint Andrews, en Escocia, donde ambos estudiaban Historia del Arte y comenzaron su romance dos años después, aunque estuvieron unos meses separados durante 2007.

Ella aportará "el toque de normalidad" a la vida del príncipe del que careció de niño, según un experto de temas monárquicos citado por la agencia alemana Dpa.

Por su parte, la reina Isabel y su esposo, el duque de Edimburgo, dijeron estar "totalmente encantados" con el compromiso. Esto último es clave, ya que Guillermo debe contar con la venia de su abuela para poder comprometerse, según una ley del siglo XVIII. Además, la reina tendría que haber negado su permiso si el primer ministro, David Cameron, hubiese desaconsejado la boda. Incluso resulta una condición inevitable que la novia sea anglicana, ya que de no ser así, Guillermo tendría que renunciar a sus derechos a la sucesión de la corona. Actualmente, nada se exige de la alcurnia de la futura princesa.