ES FACIL entusiasmarse con la nueva generación de videojuegos considerando que sus antecesores se encuentran entre los equipos que más tiempo se mantuvieron en el mercado hasta ser reemplazados (siete años en el caso de la PS3 y ocho para la Xbox 360), pero por ahora, no todo lo que brilla es oro. Para muchos jugadores, esperar la calma tras la tormenta de las semanas de lanzamiento es ya una tradición y por varios motivos, esta temporada tampoco será una excepción. Si bien ambas consolas -Xbox One y PS4- ya están disponibles en el mercado local, es necesario considerar una serie de factores para elegir exactamente lo que necesita en su próximo equipo de juego.
Más allá del hardware (la parte física), lo esencial a la hora de elegir una consola es escoger aquella que tenga los mejores títulos de acuerdo a sus gustos. En estos años de existencia, la PlayStation 3 amasó más de 800 juegos entre digitales y descargas, mientras que la Xbox 360 llegó a casi mil (971 al 19 de diciembre). Sin embargo, a ya un mes de sus respectivos lanzamientos, la Xbox One y la Playstation 4 cuentan apenas con una treintena de juegos disponibles, de los cuales pocos se señalan como títulos exclusivos. En cuanto a las series clásicas, este fin de año vio llegar a la generación actual lo último de sagas como Gran Turismo y Battlefield, que permiten aprovechar al máximo las capacidades de la generación actual sin tener que comprar una nueva.
Así como ocurrió con la Xbox 360 y Kinect, o con los videojuegos gratuitos incluidos cada mes con la suscripción a Playstation Plus, las consolas de la generación que ahora termina sorprendieron a mitad de camino con características nuevas que definitivamente desplazaron la balanza a su favor para muchos jugadores. Tal como ha dictado la historia, muchas veces es mejor aprovechar que los desarrolladores terminen de afinar algunas de las características -de juego en línea, multimedia o accesorios nuevos- de las nuevas máquinas, para así decidir una vez que su potencial haya sido mejor alcanzado. Considerando la potencia de los nuevos equipos, se espera que el futuro pueda incluir nuevos periféricos o variadas opciones para la reproducción de contenido en 4K, la nueva alta definición.
Este es un punto clave para quienes están pensando en invertir en una consola por primera vez. Ya que si bien la nueva generación de Xbox y PlayStation ya está disponible, la anterior aún sigue en producción, lo que significa el acceso a cientos de juegos y equipos mejorados -con más capacidad de almacenamiento para juegos y tamaño reducido- a un precio casi incomparable. Los llamados "bundles" son lo más conveniente, ya que incluyen todo lo necesario para comenzar a jugar (dos controles, juegos y en algunos casos, hasta suscripciones para servicios en línea) a precios mucho más asequibles que los de la generación que comienza. Por ejemplo, en algunas tiendas locales se puede hallar una Xbox 360 con FIFA 2014 y un joystick a $ 119.990 o una PS3 con Little Big Planet Karting por el mismo precio.
Uno de los principales problemas de muchas consolas tras su lanzamiento es la falla de algunos componentes, tales como el sobrecalentamiento de sus procesadores gráficos o unidades de discos, que pueden volverlas inservibles de un día para otro. Por esta razón, es importante contar con una garantía que respalde a los usuarios en caso de una situación similar. En Chile, la PlayStation 4 es la única de las recién lanzadas en tener un soporte genuino por parte de Sony Chile -aunque sólo para las compras realizadas en distribuidores autorizados-, mientras que al no ser un lanzamiento oficial de Microsoft, los usuarios de Xbox One en el país no cuentan con una garantía que respalde alguna falla, por lo que es mejor esperar hasta su lanzamiento oficial a principios de 2014.
En una tradición que se remonta a la era del legendario Super Nintendo y su rival Sega Genesis, las consolas de videojuegos tienden a renovar sus modelos con intervalos cada vez más cortos tras su lanzamiento. Así como la última versión de la PS3 es casi de la mitad del tamaño de la versión lanzada originalmenet en 2006, en el futuro podrían verse en el mercado formatos de PS4 y Xbox One aún más reducidos que las originales, eliminando el ruido y calor generado por los aparatos actuales. Además, estas ediciones mejoradas suelen incluir mayores cantidades de espacio de almacenamiento, una característica ahora obligatoria para los juegos, que requieren entre 1 a 10 GB (dependiendo del título) para poder ser jugados, sin incluir el espacio que también necesitan sus actualizaciones.
Una de las principales desventajas de las consolas de la nueva generación es su completa falta de retrocompatibilidad, es decir, la capacidad de ejecutar juegos de PlayStation 1, 2 o 3 o de jugar juegos de la Xbox 360 en el caso de la Xbox One. Mientras que las compañías han anunciado que en el futuro esto podría agregarse a modo de actualización de software que les permitan subir juegos de generaciones anteriores como contenido descargable -algo que ya se ha realizado en el pasado-, no será posible de ninguna manera ejecutar juegos en disco de las generaciones actuales. En el caso de la PlayStation 3, el primer modelo fue compatible con discos de PS1 y PS2, mientras que su versión Slim podía ejecutar discos de PS3 y PS1. En el caso de la Xbox 360, esto también era compatible -pero con limitaciones- con juegos de la primera Xbox.