Ese día lunes salí de clases del Campus Oriente de la Universidad Católica, que está en Batlle y Ordóñez. A las 18.20 horas, bajé al primer piso y salí a la calle, parándome en el sector donde se detienen los buses. A unos tres metros hacia el oriente hay instalado un quiosco, y hacia el poniente, a una distancia de 10 metros, un semáforo". (Rosemarie, estudiante UC).
"El señor Guzmán se ubicó en el asiento delantero, al lado del conductor, y salimos del lugar. Viré por Diagonal Oriente en dirección al poniente, a baja velocidad, ya que existía bastante movimiento vehicular. Después de recorrer 15 metros y pasar frente al frontis de la universidad, un sujeto salió desde los estudiantes que se encontraban en la acera norte, extrajo desde sus ropas una pistola y comenzó a dispararnos". (Luis Fuentes Silva, chofer de Jaime Guzmán) .
"Desenfundamos nuestras armas y nos adelantamos al resto de la gente hacia el automóvil, al mismo tiempo, quedando yo ubicado más al poniente y enfrentando en diagonal al vehículo, mientras que Emilio, separado de mí, como a un metro más hacia el oriente, enfrenta la ventana del copiloto. Adoptamos posición de tiro empuñando las pistolas con ambas manos y disparamos contra el objetivo, a la vez que el vehículo continúa su marcha". (Ricardo Palma Salamanca, FPMR. Autor material del homicidio del senador Guzmán).
"Sentí un disparo y escuché al señor Guzmán que decía: 'Luchito, nos disparan'. Aceleré el auto a fondo, me abrí hacia la izquierda pasando el eje central". (Luis Fuentes).
"Un automóvil moderno, de color metálico, que venía en sentido contrario por calle Batlle y Ordóñez, sobrepasó el eje de la calzada y adelantó a todos los vehículos en esa misma dirección, con luz roja. Vi que en el asiento del acompañante iba sentado el senador Guzmán, erguido, con sus lentes puestos. Al seguir el vehículo con la vista, me percaté que en el parabrisas trasero, costado derecho, estaba astillado completo y con un forado".(Leonardo, testigo).
"Recuerdo haber disparado aproximadamente seis tiros, al igual que Emilio, salvo que éste, una vez que se alejó del auto y mientras cruzamos Batlle y Ordóñez, hizo unos disparos al aire". (Ricardo Palma)
"Los sujetos corrieron por el medio de la calzada de la calle Regina Pacis. Quedé bloqueado por otro vehículo que entraba por Regina Pacis y tomé la calzada poniente contra el tránsito por unos 40 ó 50 metros tras estos sujetos. Sin perderlos de vista". (José Alfredo, civil que siguió a los frentistas).
"Corrimos por Regina Pacis hacia donde estaba estacionado el automóvil, el que abordé por el lado del copiloto, mientras que Emilio se sentó al volante". (Ricardo Palma).
"Ambos sujetos subieron a un automóvil marca Opala, pintado de negro, que se encontraba estacionado. Rápidamente salieron conduciendo por la continuación de Regina Pacis, que es Holanda, hasta Irarrázaval, perdiéndolos de vista". (María Paz, testigo)
"En el trayecto, el senador Guzmán, que estaba lúcido, me dijo: 'Es el mismo que vi adentro', y entendí que era el mismo que había disparado y que lo había visto dentro del campus. Agregó: 'Luchito, lo más rápido al Hospital Militar'; me lo dijo dos veces y no habló más". (Luis Fuentes).
"El 1 de abril del año 1991 estaba en una reunión de la comandancia (del FPMR). Hicimos una pausa para escuchar la radio, cuando fue llevado al hospital". (Mauricio Hernández Norambuena ,"Ramiro", procesado como autor del crimen del senador Guzmán).
"En calle Manuel de Salas me detuve en el auto y vi, de reojo, al auto negro estacionado en el costado de la Plaza Ñuñoa, doblé en esa dirección y quedé detenido a la misma altura del vehículo negro que había sido abandonado". (José Alfredo).
"Al percatarme que aún el Volkswagen nos seguía, propuse efectuar un rompimiento, ya que no podríamos abandonar el vehículo en el lugar planificado, por lo que Emilio viró hacia el oriente hasta Manuel de Salas. Aprovechamos para doblar al sur y dejar el auto estacionado a un costado de la Plaza Ñuñoa. Continuamos a pie por la mitad de la plaza al sur, cruzando Irarrázaval, hasta Dublé Almeyda (...). Nos subimos al primer microbús que pasó por el lugar. Emilio descendió a unas cuatro cuadras, mientras que yo continué hasta Américo Vespucio". (Ricardo Palma).
"Perdió el conocimiento y su cuerpo se inclinaba sobre mí, lo que me impedía manejar con rapidez y seguridad. Decidí pasar a la sede central de la UDI, donde pedí ayuda y junto a dos personas trasladamos al señor Guzmán hasta el Hospital Militar, donde quedó internado". (Luis Fuentes, chofer de Guzmán).
"En 1990, la dirección nacional aprobó el ajusticiamiento de personas que apoyaron a la dictadura, entre las cuales destacaban (Roberto) Fuentes Morrison, el general (Gustavo) Leigh, el coronel (Luis) Fontaine, el sargento (Víctor) Valenzuela y el senador Guzmán". (Mauricio Hernández Norambuena).
"Esa operación estuvo a cargo de nuestro compañero Mauricio Arenas Bejas, el ´Comandante Joaquín´". (Galvarino Apablaza, "Comandante Salvador", número uno del FPMR).
"Estando en mi oficina me llegó un antecedente. Se trataba de una hoja hecha por un coronel de Ejército, que manejaba a un informante conocido como 'El Noruego'. Decía que los organismos subversivos habían logrado su reorganización y pasaban a la etapa de propaganda armada. Era posible que se atentara contra colaboradores del gobierno militar. Dentro de éstos, recuerdo tan sólo tres nombres: los senadores Sergio Fernández, Sergio Diez y Jaime Guzmán". (General Hernán Ramírez Rurange, ex jefe de la Dine).
"A mediados del mes de marzo, en uno de los contactos personales que tuve con 'Emilio', me comunicó que teníamos que realizar una tarea por delante, más o menos difícil e importante. Era una obligación de todos nosotros". (Ricardo Palma).
"A raíz de una bomba que se colocó en la sede de la UDI en Pudahuel se encontraron panfletos en que aparecía el señor Guzmán con dos rayas que lo cruzaban (…); no me hizo ningún comentario sobre esta fotografía. En ningún momento me comentó que hubiese sido amenazado". (Luis Fuentes).
"Desde ese momento nuestros 'puntos' fueron más frecuentes, siendo informado en uno de éstos que la acción a realizar era el ajusticiamiento de Jaime Guzmán". (Ricardo Palma).
"Me comuniqué con el comandante en jefe del Ejército, con quien dialogué unos 15 minutos sobre el tema, llegando a la conclusión de que existían probabilidades de que ocurriera. (...) El general Pinochet me dijo que le dejara la información y que él haría que le avisaran a estas personas". (General Ramírez Rurange).
"Emilio me informó que la acción se realizaría en el lugar de trabajo del senador Guzmán, el Campus Oriente de la UC, ordenándome que visitara el lugar, para familiarizarme. (…) Observé el flujo de gente, vehículos y movimientos de patrulleros policiales. Efectué una penetración al campus, y anoté los accesos, tanto al primero como al segundo piso, donde centré la mayor atención, puesto que Emilio me había dicho que Guzmán hacía clases de Derecho allí". (Ricardo Palma).
"Durante días, mañana y tarde pude ver a un sujeto joven, el cual en todas las ocasiones adoptó una posición como de descanso en uno de los bandejones de Regina Pacis. Lo extraño es que una citroneta antigua, de color claro, lo venía a dejar y a buscar. Era recogido alrededor de las 18 horas". (Cuidador de autos Campus Oriente).
"En el siguiente punto le informé a Emilio de mis observaciones. Ahí él me dio a saber el lugar exacto donde se iba a desarrollar la acción: una escala contigua a la sala de profesores; me puso en conocimiento de la rutina que realizaba Guzmán y que consistía en que, una vez que finalizaba sus clases, se dirigía a la sala de profesores". (Ricardo Palma).
"Soy dueño del automóvil Chevorlet Opala, patente EP-6205, año 1982, actualmente de color negro. Este vehículo lo compré ese mismo año 1982 y como una manera de ayudarme lo trabajé a veces de taxi y otras veces de colectivo". (José Miguel, dueño del taxi robado utilizado para la huida).
"En un punto, Emilio me dijo que íbamos a recuperar (robar) un automóvil, citándome al paradero siete de Vicuña Mackenna. Emilio se encontraba con otro sujeto, al cual me presentó como Simón. Le indicó a Simón que se trasladara a los supermercados y ubicara un taxi, de color negro, no muy grande y en buen estado. Agregó que no fuera un 'Opala'". (Ricardo).
"Alguien me tomó desde afuera con un brazo por el cuello, me encañonó con un arma corta, podría ser revólver, ordenándome que me tirara al piso en el costado del copiloto. El sujeto que traía como pasajero también sacó un arma. A continuación, el individuo que apareció desde afuera del auto se hizo cargo del volante, dando varias vueltas, para finalmente dejarme abandonado". (José Miguel).
"Recuerda haber llamado a Jaime Guzmán, pero no se pudo reunir con él, habiendo dejado recados en todos lados, sin hablar nunca con el senador, para advertirlo de la información que poseían. Sin perjuicio de haber hablado con los otros supuestos objetivos de atentado, a quienes incluso se les hizo entrega de un memorándum con indicaciones de medidas de seguridad. No recuerda haber sido encomendado por la Comandancia en Jefe del Ejército para avisar al gobierno". (Relato judicial de la declaración entregada por el general Jorge Ballerino, quien en 1991 era jefe del comité asesor de Pinochet).
"Transcurridos un par de días concurrí hasta el punto prefijado con Emilio (...); en esta oportunidad me informó que la acción estaba circunscrita al horario de clases del senador Guzmán. Me di cuenta que el día señalado correspondía al día 1 de abril, fijamos el punto a las 16 horas". (Ricardo Palma).
"El día señalado, me reuní con Emilio. Abordando el 'Opala' negro, dirigiéndonos al Campus Oriente. Comencé a caracterizarme, pegándome un bigote. Emilio también llevaba bigote, pero no pudo usarlo por falta de pegamento. Me comunicó que para obtener el armamento debía ingresar a una schopería frente al campus. Me estaría esperando un tipo que, como seña, tendría una bebida y un chaleco sobre la mesa". (Ricardo Palma).
"El 1 de abril fui a la casa del senador para llevarlo al Campus Oriente, poco antes de las 16 horas, y llegué haciendo el mismo recorrido que de costumbre".
(Luis Fuentes, chofer de Guzmán).
"En una mesa, al centro del local, se encontraba un tipo sentado, solo. Tenía una bebida y un chaleco color oscuro. Me dirigí donde él. Le dije: 'Hola, cambiemos'; y respondió: 'Ya, cambiemos'. Extrajo de su cintura un arma que envolvió en su chaleco y la desplazó hacia mí. Yo saqué mi revólver y se lo entregué por debajo de la mesa. Desenvolví el arma, dándome cuenta que se trata de una pistola (...). Le consulté por el estado y la cantidad de munición (...). Salí del local y me encontré con Emilio. Cruzamos la calzada, ingresando al campus (…), en un momento estuve en la escala destinada a la acción. Algunas personas transitaban y cuando lo hacían cerca mío, yo disimulaba, mirando por las ventanas". (Ricardo Palma).
"Al bajar por la escala me llamó la atención la presencia de un hombre de 30 a 35 años, tez morena, bigotes. Como me di cuenta de que esta persona no pertenecía a la facultad -o no me era conocido- me di vuelta a mirarlo por segunda vez y me pareció que esquivó mi mirada". (Matilde, secretaria de Derecho de la UC).
"Luego de efectuar sus clases, alrededor de las 18.05 horas, don Jaime vino hasta la secretaría, trayendo el libro de clases como lo hacía habitualmente. Luego de conversar por 10 minutos, le hice entrega del cheque de su sueldo". (Ana, secretaria de Derecho de la UC).
"Lo vimos pasar y dirigirse a la sala de profesores a entregar el libro, por lo que nos adelantamos, según el plan, bajando algunos peldaños en forma muy lenta, esperando que apareciera el senador, quien no tardó mucho. Antes de que nosotros llegáramos a uno de los descansos, al no escuchar los pasos, miré hacia atrás, percatándome que Guzmán estaba detenido en el segundo peldaño, desde el cual nos observaba. Se dio vuelta y regresó a la sala de profesores". (Ricardo Palma).
"Se devolvió y me dijo que fuera a llamar a su chofer. Bajé por la escala que da acceso a los estacionamientos de vehículos y le hice señas al chofer". (Ana, secretaria).
"Abandoné el móvil subiendo hasta las oficinas donde se encontraba el senador hablando por teléfono". (Luis Fuentes, chofer).
"Me fijé que don Jaime se encontraba hablando por teléfono, pero no escuché lo que decía. Tampoco qué conversó con el chofer". (Ana).
"Evaluamos la acción, llegando a concluir que, pese a que el senador se dio cuenta de nuestra presencia, teníamos una nueva oportunidad en el exterior, siempre y cuando Guzmán, en su vehículo, pasara por delante del paradero, a la entrada del campus".
(Ricardo Palma).
"Luego que cortó, me dijo: 'No, ya no te necesito, Luchito', bajemos juntos. Y así se hizo, sentándose él en el asiento delantero al lado mío (…). Al salir a la calle Batlle y Ordóñez le pregunté hacia dónde íbamos y me dijo: "Suecia al llegar a Lota".
(Luis Fuentes).
"En circunstancias que el senador Jaime Guzmán Errázuriz hacía abandono del mencionado lugar, por calle Batlle y Ordóñez, en dirección al poniente, al detenerse el ve- hículo ante el paso de peatones ubicado a la salida del costado derecho, un individuo desconocido procedió a disparar un arma corta 9 mm en un número aproximado a seis tiros, dándose a la fuga. El senador fue atendido en el Hospital Militar, presentando heridas a bala torácico abdominal complicadas, anemia aguda, las que le provocaron la muerte a las 21.35 horas, aproximadamente, mientras era intervenido quirúrgicamente. (Parte del teniente de Carabineros Francisco Farías Saavedra).
"Conclusiones: 1. Cadáver de sexo masculino, que mide 170 cm y pesa 63 kg. 2. La causa de la muerte es la herida de bala tóracico-abdominal, sin salida de proyectil. 3. La trayectoria intracorporal seguida por el proyectil es de derecha a izquierda, levemente de atrás-adelante, y levemente de arriba-abajo. 4. Se comprobó, además, otra herida de bala torácica derecha, que siguió una trayectoria de derecha a izquierda, de abajo-arriba y levemente de atrás-adelante, sin lesionar elementos anatómicos importantes, para salir al exterior. 5. Se trata de lesiones de tipo homicida".(Informe de autopsia de Jaime Guzmán).