Poder ver en vivo más de una vez a una megaestrella de la música en territorio local es una posibilidad que, dadas las actuales condiciones de la industria, no parece demasiado descabellada. Pero que este regreso se registre con sólo meses de diferencia es algo más improbable. La encargada de romper los pronósticos será, justamente, una de las más rebeldes e iconoclastas figuras de la escena pop planetaria, quien alista su retorno a Chile a menos de un año de su debut en la capital.
En septiembre próximo Rihanna volverá a encontrarse con sus fanáticos chilenos, luego que una productora local cerrara un acuerdo para su regreso a la capital. Tal como consignó La Tercera en enero, ya a comienzos de 2016 diversos promotores nacionales iniciaron los primeros acercamientos para gestionar la vuelta de la barbadense, quien el 29 de septiembre de 2015 materializó su esperado debut en el país. Las conversaciones finalmente llegaron a buen puerto con una de estas firmas interesadas.
Si bien aún no hay un recinto definido para este nuevo recital de la solista en Santiago, el lugar que corre con ventaja es el Estadio Nacional, el mismo donde hace ocho meses congregó a cerca de 50 mil fanáticos.
De concretarse esa opción, sería una de las pocas similitudes que tendría esta nueva visita con aquel show del año pasado, ya que el retorno de la intérprete de Work se dará bajo condiciones muy distintas: si en 2015 aterrizó en Santiago casi de rebote, con un concierto sencillo y aprovechando su presentación en el festival brasileño Rock in Rio, esta vez la diva llegará con su show completo y como parte de un recorrido más formal, en una extensión de su actual Anti World Tour, la gira promocional del álbum que lanzó a fines de enero.
De hecho, para los próximos días se espera el anuncio oficial con todas las fechas del tramo sudamericano del recorrido, que por estos días pasa por Estados Unidos y que entre junio y agosto llevará a la cantante a diversas ciudades europeas. Si bien todavía falta ajustar algunos detalles, el nuevo periplo regional de la barbadense contemplaría también shows en Argentina, Perú, Paraguay, Colombia y Brasil.
Este último, por ahora, sería el único donde la artista realizaría dos conciertos -en Río de Janeiro y Sao Paulo-, según versiones de la prensa brasileña. En Colombia, en tanto, estaría prácticamente cerrada para liderar la primera versión del festival Lollapalooza en ese país, que se realizará el 17 y 18 de septiembre en el Parque Simón Bolívar de Bogotá y cuyas entradas se ponen a la venta el 21 de mayo.
Mejor versión
El de Jacksonville Arena de Florida (EE.UU.), el pasado 12 de marzo, fue el primer recital del Anti World Tour, la gira con que Rihanna promociona su octavo álbum de estudio. Anunciado en noviembre del año pasado, es el primer recorrido oficial de la artista desde fines de 2013, cuando remató el Diamonds World Tour. En el intertanto, se enfocó en otros proyectos, sólo interrumpidos por la aparición de algunos singles y giras acotadas por Norteamérica, como la que realizó junto a Eminem durante agosto de 2014.
Con la salida de Anti, su primer LP desde Unapologetic (2012), la solista volvió a los grandes espectáculos, con un show que incluye juegos de luces, pantallas gigantes, múltiples cambios de vestuario, coreografías trabajadas y un repertorio que en cerca de 90 minutos recorre 25 canciones, entre éxitos pasados y cortes de su último álbum.
En ese sentido, el regreso de Rihanna al país se proyecta como una suerte de revancha, en especial para aquellos que se quedaron con las ganas de ver en todo su esplendor a su ídola, quien en su debut capitalino ofreció una presentación acotada, con una puesta en escena austera y abusando de los medleys de sus éxitos.