En octubre, en una galería de Los Angeles, Rihanna juntó a un puñado de fans y periodistas en un evento al que debían acceder con los ojos vendados. Luego de algunos minutos de suspenso, la megaestrella de Barbados apareció para revelarle a los presentes y al mundo la carátula y el título oficial de su octavo álbum de estudio, hasta entonces conocido simplemente bajo el nombre de R8. Por ahora, esas son dos de las pocas certezas que existen sobre Anti, el nuevo trabajo de estudio de la cantante. Un lanzamiento marcado por las dudas y las postergaciones -luego que en el propio sitio web de la cantante se anunciara su salida para noviembre pasado- y que, según las últimas versiones de la prensa anglo, podría aparecer incluso anoche u hoy. Para los tiempos de Rihanna, acostumbrada a sacar un álbum por temporada, los tres años que han pasado desde Unapologetic parecen ser demasiados. Para acrecentar las dudas, la cantante Sia, compositora de varios éxitos de la barbadense, reveló hace algunos días que ésta le pidió más canciones para Anti. Con todo, el margen de la estrella es acotado: los boletos para la gira mundial de promoción de Anti, que comienza a fines de febrero en California, ya están a la venta.