Los números de la japonesa Subaru, tanto en el mundo como en Chile, son tan azules como su logo. Se convirtió en la marca más rentable de Japón durante abril-junio, alcanzando un margen de ganancia operativa de 12,7%, que se tradujo en utilidades por US$ 500 millones.

En Estados Unidos, las ventas crecieron 27% entre enero y julio, mientras que en Canadá acumula seis meses al alza, comercializando 3.000 unidades al mes.

En Chile, en los primeros ocho meses, se han comercializado más de 3.200 unidades, lo que representa un crecimiento de 22% respecto del mismo período de 2012.

Pero toda esta buena racha no logró llegar a uno de los concesionarios de Subaru en Chile. A mediados de agosto, el Banco BBVA solicitó la quiebra de Automotora Suiza, empresa que comercializaba cerca del 20% de las unidades Subaru.

"Es súper lamentable, la pasamos mal. Quisiéramos que nunca ocurrieran cosas como ésta, con un empresario que fue por 25 años nuestro concesionario", expresó el gerente de división Chile de Subaru, Roberto Delgado.

A su juicio, la caída de Automotora Suiza se explica por la expansión que comenzó a tener la empresa, como concesionario de otras marcas, lo que también incluyó crecimiento fuera de Santiago.

"Tiene que ver con una administración y una estructura de empresa no preparada para un crecimiento de esa forma, que al final del día ese crecimiento tan grande, con una estructura quizás no adecuada del punto de vista del financiamiento de la concesionaria y de la administración, hacen que al final se genere un cóctel en que incluso, con un buen negocio de Subaru, quede en esa condición".

Delgado agregó que este fenómeno no sólo se da en el mercado automotor y que se debe mirar con atención: "La mirada tiene que estar dada por cómo podemos agregarles un poco más de contenido a las empresas medianas y pequeñas para que permanezcan en el largo plazo".

A pesar del traspié, "nuestro negocio sigue estando sano en el sector oriente", afirmó el ejecutivo. Esperan levantar con rapidez otra ubicación en Las Condes, de la mano de Indumotora: "Reasignamos los clientes a otros concesionarios, manejamos la situación e hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos para que no hubiera problemas con clientes".

Los planes son hacer de Indumotora el gran distribuidor en el Cono Sur. "En 2014 y 2015 van a suceder cosas en esa dirección", comentó Roberto Delgado, agregando que hay planes de incorporar otros países en el mercado latinoamericano. Este año, sumando Chile, Argentina y Perú, esperan llegar a 7.000 unidades vendidas, mientras que la fábrica producirá para los países de México al sur 9.500 unidades.

"Por lo tanto, somos más del 70% en Chile, Perú y Argentina de todo lo que la fábrica hace para esta zona", indicó el ejecutivo.