Un sismo de magnitud 7,6 en la escala de Richter remeció ayer el noroeste de Costa Rica, sin dejar daños materiales de envergadura. El hecho generó que el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada chilena (Shoa) emitiera una alerta de tsunami en las costas del país, que fue levantada tras 40 minutos.
El epicentro del terremoto fue localizado 11 kilómetros al sudeste de la ciudad de Nicoya, en la provincia de Guanacaste. Aunque la Cruz Roja informó inicialmente dos víctimas fatales producto del sismo, por la noche, la presidenta Laura Chinchilla dijo que no se registraron víctimas fatales.
Con anterioridad, la Cruz Roja había señalado que una mujer falleció en la localidad de Filadelpia debido a un infarto sufrido por el impacto que le provocó el sismo. Además, se comunicó la muerte de un trabajador al que presuntamente lo alcanzó la estructura de una construcción en la que trabajaba.
En la región de Guanacaste se reportaron daños en viviendas y algunos edificios, pero el gobierno dijo que no era necesario declarar una emergencia nacional. Por su parte, la Presidenta Laura Chinchilla llamó a la población a mantener la calma y señaló que la Comisión Nacional de Emergencia estaba realizando un recuento de daños para entregar un reporte posteriormente.
Ayer, tras el evento principal, ocurrieron unas 170 réplicas, algunas de magnitudes entre 3 y 4. No obstante, Alejandro Gutiérrez, oceanógrafo del Observatorio Vulcanológico de Costa Rica, descartó la posibilidad de que se produjera un tsunami.
Mientras, en San José, la capital del país, el temblor se sintió con fuerza y provocó el pánico en centros comerciales y oficinas públicas. Se produjeron cortes en los servicios telefónicos fijos y celulares, internet y el servicio eléctrico en varios puntos del país, según informó la agencia Dpa. "Me dio mucho miedo, la vajilla se cayó del cajón, tuvimos que salir de la casa y abrazarnos afuera", dijo José Angel Suazo a una radio en Costa Rica desde el popular balneario de Playa Tamarindo.
Este fue el terremoto más intenso en Costa Rica desde 1991, cuando un movimiento de magnitud 7,6 grados Richter dejó 47 muertos. En enero de 2009, 40 personas fallecieron con un temblor de 6,1 de magnitud.
Alerta regional
Por otro lado, el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico decretó en un principio la alerta para Costa Rica, Panamá, Nicaragua, El Salvador, Honduras, México, Colombia, Ecuador, Guatemala y Perú, luego la mantuvo para Costa Rica y sus vecinos Panamá y Nicaragua. Finalmente, la suspendió para toda la región.
En Nicaragua, las autoridades dijeron que se mantendrían atentas ante posibles réplicas, luego de que se suspendiera la alerta que obligó la evacuación de miles de pobladores en 76 comunidades de la franja costera del Pacífico.
Según el general del Ejército Mario Pérez Cassar, en Nicaragua no se reportaron muertos, heridos ni daños materiales a causa del sismo. Sin embargo, la oficialista Nueva Radio reportó la muerte de tres mujeres al volcarse una lancha en la región de La Cruz del Río Grande, en la costa surcaribeña del país. El sismo se sintió con fuerza en gran parte del territorio nicaragüense, incluida la capital, donde miles de personas salieron a las calles alarmadas y se interrumpió la señal de los teléfonos celulares.