El subsecretario de Hacienda, Julio Dittborn, junto al superintendente de Casinos de Juego, Renato Hamel, abordaron ayer el aumento de máquinas tragamonedas que operan fuera de los casinos de juego autorizados. Dittborn anunció que "en el primer semestre enviaremos al Congreso un proyecto de ley que regule este tema". El subsecretario dijo que "el proyecto permitirá crear una patente especial para el funcionamiento de este tipo de locales y los municipios multar a quienes operen máquinas con una patente comercial de un giro diferente".

Añadió que mediante ordenanzas municipales se regulará orden y seguridad, exigencias sanitarias, acceso de menores, horarios de operación y cercanía a colegios, entre otros.

Conforme al marco jurídico, los juegos de azar en el país están prohibidos, salvo que una ley en forma excepcional los autorice. Por eso, la iniciativa se concibió como una excepción a la prohibición legal de explotar juegos de azar.

La regulación y fiscalización de las salas con tragamonedas se radicará en los municipios y Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ). También, se fijará un impuesto específico a la explotación de tragamonedas para equilibrar la competencia con locales autorizados para explotar juegos de azar.