La audiencia de sentencia de Bill Cosby comenzó el lunes con un debate sobre si el comediante de 81 años debe ser declarado un "depredador sexualmente violento", una etiqueta que lo someterí­a a asesorí­a obligatoria de por vida y a notificar a la comunidad sobre su paradero.

Cosby, quien enfrenta hasta 30 años en prisión por drogar y abusar de una administradora del equipo de baloncesto de la Universidad de Temple en el 2004, peleó los esfuerzos de la fiscalí­a por clasificarlo como depredador sexual bajo la ley del estado.

Kristen Dudley, una psicóloga de la junta estatal de Pennsylvania, testificó que Cosby tiene deseos incontrolables de violar a jóvenes mujeres y que probablemente lo haría de nuevo de tener la oportunidad. Agregó que el abuso de Cosby de Andrea Constand encaja en el patrón de conducta predatoria del exastro de la televisión.

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La denunciante, Andrea Constand, este lunes en la corte de Montgomery. Foto: David Maialetti/ via AP.[/caption]

Cosby solí­a hacerse amigo de mujeres para luego traicionar su confianza sedándolas con drogas y alcohol y violándolas con el "solo propósito de su gratificación sexual", declaró Dudley.

En un intento por evitar la etiqueta de depredador para su cliente, los abogados de Cosby argumentaron que la propia ley estatal es inconstitucional. Los legisladores en Pennsylvania y otros estados han reescrito en repetidas ocasiones sus leyes sobre agresores sexuales luego que tribunales las encontraran vagas e injustamente punitivas, pero los fiscales le dijeron al juez Steven O'Neill eran necesarias para la seguridad pública, y el juez permitió que la audiencia sobre el estatus de Cosby procediera.

La defensa sostuvo que es poco probable que Cosby cometa otro crimen debido a su avanzada edad y estado de salud -está legalmente ciego y usa un bastón- y a que no ha habido quejas nuevas ante las autoridades desde que Constand hizo su denuncia en el 2005.

La disputa legal se produjo al inicio de una audiencia en la que se determinará cómo será castigado el actor conocido una vez como el Papá de América por drogar y abusar sexualmente de Constand en su casa a las afueras de Filadelfia hace más de 14 años.

El proceso transcurrió mientras otro extraordinario drama #MeToo continuaba desenvolviéndose en el Capitolio, donde el nominado a la Corte Suprema Brett Kavanaugh enfrenta acusaciones de conducta sexual inapropiada de hace más de tres décadas.

Cosby fue la primera celebridad en ir a juicio en la era de #MeToo y podrí­a ser el primero en ir a prisión, quizás por el resto de sus dí­as, tras haber sido hallado culpable en abril.

El actor lució serio al entrar al juzgado del brazo de su vocero mientras manifestantes le gritaban. Constand arribó poco después.

Al final de una audiencia que podrí­a durar dos dí­as, el juez del condado de Montgomery Steven T. O'Neill lo sentenciará a hasta 30 años en prisión o lo enviará a su casa bajo libertad vigilada. Los lineamientos del estado para alguien como Cosby, que no tiene condenas previas, establecen entre uno y cuatro años tras las rejas.

"Obviamente, las acusaciones son serias y, excepto por su edad y su mala salud, normalmente garantizarí­an algo de tiempo en la cárcel", dijo Samuel Stretton, un veterano abogado defensor que no está relacionado con el caso.

En los años desde que Constand acudió por primera vez a la policí­a en 2005, más de 60 mujeres han acusado a Cosby de violencia sexual, aunque ninguna de esas denuncias ha llevado a cargos penales. Al menos dos de esas mujeres, Lise-Lotte Lublin y la exmodelo Janice Dickinson, estuvieron en la corte el lunes.

Los fiscales esperaban que otras acusadoras rindieran testimonio en la audiencia de sentencia, pero la oficina del fiscal de distrito dijo el lunes a The Associated Press que eso no ocurrirí­a. No estuvo claro si Constand o Cosby hablarí­an.

Unas horas antes de que comenzara la audiencia, Constand tuiteó los Efesios 4:26, un verso de la Biblia sobre soltar la ira: "Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis oportunidad al diablo".

Cosby, quien creció en un complejo de viviendas públicas en Filadelfia, se convirtió en el primer protagonista negro de una serie de TV de horario estelar, "I Spy", en 1965. Se mantuvo como un actor de primera lí­nea en Hollywood el siguiente medio siglo, alcanzando su cumbre en la década de 1980 con el popular "Show de Bill Cosby", en el que dio vida al doctor Cliff Huxtable, un afable y chistoso padre de familia.

La AP no suele identificar a personas que dicen que son ví­ctimas de abuso sexual a menos que éstas lo hagan públicamente, como es el caso de Lublin, Lasha y Constand.