Cada año nos ha pasado que queremos hablar de conservas cuando empieza el otoño; es el momento de destapar frascos llenos de color y sabor y recuperar la intensidad de la fruta de verano, y claro, cuando queríamos hacerlas ya no había con qué. Este año nos acordamos antes de tener las ganas de comerlas, y preparamos tres versiones con distintos criterios para que los usen como referencia y exploren. He visto amigos que con la experiencia son capaces de improvisar y rectificar antes de enfrascar; la buena mano, el ojo para las medidas, son todas cosas que se desarrollan haciendo, así que reúsen frascos de vidrio que tengan guardados, asegúrense de que sean herméticos... y a hervir las frutas, y hagan las combinaciones que quieran, pero no se vuelvan locos, porque una mermelada clásica siempre se agradece.

Siguiendo con la comida (porque comer es lo que uno más hace durante el verano), les mostramos ideas que todos vamos a querer probar este año, ingredientes preparados de nuevas maneras, influencias ajenas pero que queremos hacer propias, y tragos, porque hace rato la barra está de moda. Disfruten este mes, que el verano pasa rápido.

Sobre nuestros incendios se ha dicho tanto… espero que se puedan replantear estrategias, y quizás predicar con el ejemplo aunque sea en pequeños detalles: si tienen un jardín, evalúen la diversidad de plantas, mientras más, mejor ecosistema para las abejas e insectos, pieza clave al momento de replantar y reproducir lo mucho que se ha dañado.