Luca Guadanino, el director italiano que ganó reconocimiento masivo con Call Me By Your Name, será el responsable de concretar un remake del clásico de terror Suspiria, el emblemático exponente del cine giallo de Dario Argento.

En esa tarea, que en algún momento se especuló que podría debutar en el próximo festival de Cannes, bajo el amparo de Amazon, la actriz Dakota Johnson reconoció que la experiencia de filmar la nueva película fue un proceso muy duro.

"No voy a mentir, eso me jodió tanto que tuve que ir a terapia", reconoció la actriz a la revista Elle, sobre su tarea de interpretar a una bailarina que entra a una academia que esconde oscuros secretos. "Estuvimos en un hotel abandonado en lo alto de una montala. Tenía 30 líneas de teléfono en el techo, por lo que había una electricidad pulsado a través del edificio, y todos estaban dándose shocks entre si. Estaba helado como la mierda y era demasiado seco", explicó sobre el escenario en el que desarrollará la historia.

Guadagnino ha descrito esta nueva versión como un homenaje del original, en vez de un remake tradicional. "Suspira fue el sueño megalomaníaco adolescente más impresionantemente preciso que podría haber tenido", afirmó el director a The Guardian sobre su conexión con el original. "Me estoy acercando a esto como un homenaje de esta emoción increíble y poderosa que sentí cuando vi la película", agregó.