El gobierno anunció el miércoles un nuevo cambio a las medidas de confinamiento vigentes por la pandemia en el país: a partir del viernes, el toque de queda decretado hace 150 días se retrasará en una hora, iniciándose a las 23.00. No tuvo cambios, eso sí, el horario de término, que durará hasta las 5.00, como es habitual desde marzo.

La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, explicó que el cambio busca “tener una mayor cantidad de tiempo en las salidas (de quienes vuelven a sus casas) y así evitar los contagios”.

“El toque de queda ha jugado un rol fundamental en la pandemia, pero viendo los avances en materia de salud, se permite ampliar este horario para que, en aquellas comunas que estén en las fases 2, 3, 4 y 5, la gente tenga más distancia de horario para el transporte público y realización de actividades”, agregó Martorell.

Al inicio de la pandemia algunos expertos justificaban la aplicación del toque de queda como medida sanitaria, pues, al reducirse la circulación en las noches, bajaba también la probabilidad de accidentes de tránsito, por ejemplo, y por lo tanto, los pacientes que podrían requerir ventilación mecánica. A cinco meses de esta medida, sin embargo, los especialistas dudan de su efectividad.

Carmen Castillo, exministra de Salud e integrante de la Mesa Social Covid-19, cree que el gobierno “debe evaluar qué sentido tiene el toque de queda ahora, si tiene una razón sanitaria o no, porque eso hay que preguntárselo. Yo creo que es necesario empezar a soltar un poco a la gente, porque un toque de queda uno lo acepta un tiempo, puede que tres meses o seis meses, pero más, no lo sé”. En su opinión, este retraso de una hora buscaría “aflojar la mano y ver cómo se va comportando la gente, como sociedad, pero esto debe ir en paralelo con una claridad de lo que significa el riesgo de las reuniones”.

Gabriel Cavada, epidemiólogo de la U. de Chile, dice que el toque de queda hubiese tenido impacto “si hubiera vida nocturna activa, pero no la hay, entonces la gente que trabaja se recoge necesariamente antes”.

Cavada dice que se puede, eventualmente, evaluar su impacto en otras áreas, como la delincuencia. “Creo que el toque de queda tiene el impacto de disminuir la movilidad, algo debe haber hecho, pero no tengo una gran claridad, porque la cuarentena total pasaba por sobre el toque de queda”, precisa.

El gobierno también anunció avances y retrocesos de comunas en el plan Paso a Paso. Por ejemplo, el viernes retrocederán Punta Arenas, Ovalle, Penco y Tomé, de la fase de transición (Paso 2) a cuarentena (Paso 1), mientras que Hualpén, Talcahuano y Concepción pasarán de preparación (Paso 3) a transición (Paso 2). Por el contrario, el lunes avanzarán las comunas de Los Andes, Curicó, Peñalolén, San José de Maipo, Padre Hurtado y Peñaflor, desde cuarentena (Paso 1) a transición (Paso 2). A la vez, Juan Fernández pasará de preparación (Paso 3) a apertura inicial (Paso 4).

“Recibimos el anuncio de la autoridad sanitaria con cautela. Hemos bajado contagios, pero el llamado es a no confiarse y seguir las recomendaciones”, dijo la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao.

Caída de casos

La relajación del toque de queda ocurre cuando el país registra cifras de contagio cada vez más bajas. Según el reporte del Ministerio de Salud, el miércoles se registraron 1.233 casos nuevos, la menor cifra en 100 días (11 de mayo), mientras que en la Región Metropolitana se detectaron 322 contagios, el menor registro desde el 22 de abril, es decir, 119 días.

Según Cavada, la situación de la Región Metropolitana es promisoria, pues tiene un R efectivo (la tasa de reproducción del virus) menor a uno. “La pandemia en este momento no está en expansión, pero me gustaría tener más evidencia de contracción fija en términos de que el R fuera cada vez menor, pero se mantiene pululando por debajo del 1, muy cerca. Nos mantenemos a la baja, pero a uno le gustaría que fuera más pronunciado”, dice.

Según el 43° Informe Epidemiológico, las comunas con más casos activos de la RM son Puente Alto (652), Maipú (332) y Renca (301). Pero a nivel país, las que concentran a más enfermos contagiantes son Arica (779), Antofagasta (756) y Copiapó (736).

El alcalde de Renca, Claudio Castro, dice que su comuna encabeza el listado, porque están realizando muchos exámenes de PCR, incluso más que Santiago: “Tenemos un sistema de trazabilidad de siete cuadrillas, con 200 personas, y eso nos permite encontrar a más enfermos asintomáticos”. Además, advierte que “nos han preguntado qué estamos haciendo mal, pero la respuesta es que estamos testeando mucho. Por cada enfermo encontramos 4,1 contagiados más, por lo que no se debe ver solo la tasa de contagios activos, sino que también la cantidad de test que se aplican.

Trazabilidad

El informe detalló el nivel de trazabilidad de los casos que reportan las seremis. Según ese análisis, entre el 8 y el 14 de agosto se detectaron en el país 13.274 personas contagiadas que, a su vez, identificaron a 28.784 contactos estrechos. De ese grupo, 24.948 personas (87%) fueron investigadas antes de 48 horas, indicador sindicado como clave para controlar la pandemia.

De las comunas que en dicha semana tuvieron más de cien contagios nuevos, Talcahuano registra la menor trazabilidad: solo se pudo investigar al 22% de los 445 contactos que reportaron los pacientes.

El alcalde de Talcahuano Henry Campos, explica que esto ocurrió porque había una escasa cantidad de funcionarios para seguir los contactos estrechos. “Hacíamos testeos, pero no había posibilidad de hacer la trazabilidad, encontrar a sus contactos estrechos o incluso darles licencias médicas para que se quedaran en sus casas”, dice.

La situación se repite en la Región del Biobío, donde comunas como Coronel (26%), Hualpén (28%), San Pedro de la Paz (33%) y Concepción (38%) han tenido una baja pesquisa de los contactos estrechos de sus enfermos. “Ayer (martes) empezamos el proceso de trazabilidad en la comuna, porque antes solo hacíamos testeos, pero ahora la seremi nos entrega información para trazar”, añade Campos, quien cuenta que en la región el 74% de los contagios proviene de brotes familiares, que ocurrieron cuando la gente se reunió y se relajaron las medidas de seguridad en los hogares.

En el polo opuesto de las comunas que han logrado trazar a los contactos estrechos está Peñalolén, que investigó al 100% de los 236 contactos estrechos de sus pacientes. Lo mismo las comunas de Chillán, Puerto Montt y Calama.

En tanto, entre las comunas que tuvieron más de cien contagios entre el 8 y 14 de agosto y donde más se encontraron casos a través de la búsqueda activa son Rengo (76%), Lo Prado (73%), La Pintana (71%) y Pudahuel (69%).