En un comunicado, el gobierno afgano aseguró hoy que una "unidad" de las fuerzas extranjeras sacó a diez personas de tres casas, ocho de ellas escolares, disparó contra ellas y las mató.

Asadulá Wafa -jefe de la delegación presidencial que investiga las muertes de 10 personas en el este de Afganistán- concluyó que los civiles, entre ellos niños de entre 12 y 14 años, perdieron la vida el domingo durante una una ofensiva militar que tuvo lugar en el distrito de Narang, en la provincia oriental de Kunar, fronteriza con Pakistán.

Wafa dijo en una entrevista telefónica que ocho niños estaban entre los muertos descubiertos en una casa ubicada en la localidad. Asimismo, Wafa afirmó que está convencido que todos los muertos en el incidente de Kunar eran civiles inocentes

"He hablado con el director de la escuela del poblado y nos dio detalles sobre los chicos muertos", dijo Wafa. "Los escolares no pueden ser de Al-Qaeda. Yo confirmo que ellos eran personas inocentes muertas por equivocación. Hablé con Karzai sobre estos resultados".

Sin embargo, un funcionario de la OTAN indicó previamente que en los informes preliminares -que entregaron los soldados que participaron en la operación- indicaron que los muertos eran insurgentes, todos ellos hombres jóvenes.

La muerte de civiles es uno de los temas más delicados para los soldados extranjeros en Afganistán, particularmente ahora cuando 37.000 elementos militares estadounidenses y de la OTAN están a punto de ser desplegados en el país, azotado por la guerra.

Según un informe de la ONU, 1.500 civiles afganos murieron en los primeros ocho meses de 2009, un 23 por ciento de ellos en acciones militares de las fuerzas extranjeras y afganas, sobre todo en ataques.

Hoy, cientos de manifestantes quemaron una figura del Presidente Barack Obama en Jalalabad -al sur de Afganistán- durante una protesta por la muerte de los niños en Kunar.

Al mismo tiempo, hubo otra protesta similar en la capital afgana. En ella, los manifestantes corearon: "¡Unidad, unidad, muerte al enemigo del Islam!", e hicieron un llamado a Obama para que saque a sus soldados del país.  Esta ha sido la denuncia más grave que ha hecho el gobierno de Kabul desde principios de diciembre, cuando funcionarios afganos expusieron que 12 civiles habían muerto en un ataque aéreo en la provincia de Laghman. La OTAN negó esa versión. 
 
La OTAN no hizo comentarios sobre las conclusiones de esta investigación pero aseguró que en breve el organismo expresará su reacción.