El Banco Central redujo este lunes su proyección de crecimiento para el Producto Interno Bruto (PIB) el próximo año a un rango de entre 1,5% - 2,5% versus el rango de entre 1,75% y 2,75% estimado en septiembre.

En tanto para este año el instituto emisor ajustó su previsión a una expansión de 1,5%, versus el rango de 1,5% a 2% pronosticado previamente.

"Para el año 2017, la menor velocidad inicial, en un contexto de mayores riesgos y niveles de confianza que siguen siendo marcadamente pesimistas, hacen prever que la actividad demorará algo más en lograr tasas de crecimiento cercanas a su potencial", señaló el presidente del Banco Central, Mario Marcel al presentar el Informe de Política Monetaria (Ipom) ante la Comisión de Hacienda del Senado .

Agregó que "los fundamentos de un mayor crecimiento para el próximo año (comparado con el actual) están en que la economía no presenta desbalances, que el sector minero no repetirá las fuertes caídas de años previos y que la inversión mostrará un aumento después de tres años

seguidos de caídas anuales".

"El efecto de estos cambios será más evidente en la segunda mitad del año", precisó.

Asimismo indicó que todo ello se dará en un contexto en que continúa la gradual consolidación fiscal anunciada por el gobierno y en que las condiciones monetarias seguirán siendo expansivas.

El Banco Central estimó que la economía retomará tasas de expansión cercanas al potencial hacia fines del año 2017, aunque este proceso ocurrirá algo más lento de lo que se había previsto en septiembre.

Para la demanda interna el instituto emisor prevé una expansión de 1,1% este año y de 2,6% el próximo mientras que la inversión caería 0,6% en 2016 y aumentaría 0,7% el 2017. En tanto el precio del cobre promediaría US$2,20 la libra este año y US$2,35 la libra el próximo.

INFLACION

En cuanto a la inflación el instituto emisor proyectó una desaceleración más rápida que la esperada en septiembre, con lo que cerraría 2016 en 2,9%, misma variación que anotaría en diciembre de 2017. En promedio, el próximo año el IPC anotaría una variación de 2,7%, sobre el 3,8% de 2016.

El informe sostiene que en la proyección de inflación incidirá una importante reducción de la inflación de tendencia (IPC sin alimentos y energía --IPC SAE) explicada por distintos elementos. Por un lado, la trayectoria del tipo de cambio seguirá contribuyendo a la reducción de la inflación de bienes importados. Por otro, se espera que la inflación de servicios siga descendiendo gradualmente, más allá de los efectos que por una sola vez tendrán la salida de la base de comparación del aumento del impuesto de timbres y estampillas en enero del 2016, precisa.

Este descenso se apoyaría también porque la menor inflación con que terminará el año 2016 afectará los precios indexados durante la primera parte del próximo. "Se prevé que la inflación de energía y de alimentos aumente, contrapesando en parte los efectos sobre el IPC total de los elementos mencionados", indica el informe. Respecto del tipo de cambio, dice que al cierre estadístico del Ipom —el martes 13 de diciembre— la cifra nominal se ubicaba cerca de los $650, luego de transarse en torno a los $680.

"Considerando el promedio de los diez días previos al cierre estadístico de este Ipom y el anterior, la paridad peso/dólar casi no ha variado, pero se ha apreciado cerca de 3,5% en términos multilaterales", precisa. Luego sostiene que el nivel actual del tipo de cambio real (TCR) está por debajo de lo observado hace unos meses, pero en el rango de valores coherentes con sus fundamentos de corto plazo, aunque inferior a sus promedios de los últimos 15 o 20 años.

El supuesto de trabajo del escenario base del Ipom supone que el tipo de cambio real se depreciará gradualmente a lo largo del horizonte de proyección.

Respecto de la Tasa de Política Monetaria (TPM), el escenario base del informe utiliza como supuesto de trabajo que seguirá una trayectoria comparable con la que incorporan distintas medidas de expectativas. "Esto involucra la posibilidad de recortes en la tasa en la medida que se confirmen las proyecciones del escenario base, tal como lo indicó el Consejo en su comunicado de la última Reunión de Política Monetaria", afirma.

Con ello, precisa se asegura que la política monetaria continuará siendo expansiva a lo largo de todo el horizonte de proyección. "La implementación de la política monetaria y los eventuales ajustes en la TPM serán contingentes a los efectos de la nueva información sobre la dinámica proyectada de la inflación", señala el informe.