El director de la aerolínea boliviana Lamia, Gustavo Vargas Gamboa, decidió declararse culpable por el delito de homicidio culposo, que se le acusa en la investigación del accidente ocurrido en noviembre del año pasado, que le costó la vida a 71 personas, entre ellas casi la totalidad del plantel del Chapecoense brasileño.

Vargas está detenido de manera preventiva desde diciembrey su defensa informó que se declarará culpable del citado delito imputado, aunque no de los otros tres que incluye la cuasa: lesiones gravísimas, lesiones culposas y desastre en medios de transporte.

El abogado que lleva adelante la defensa de Vargas, Jerjes Justiniano, explicó que la determinación del directivo se debe a los problemas de salud que lo aquejan. "Sólo le funciona un riñón, tuvo tres infartos, tiene presión arterial alta y debe colocarse insulina a diario", explicó el jurista. "Prefiere que lo condenen y salir de la cárcel para reponerse", añadió.

El Ministerio Público, no obstante, aún no ha respondido a la propuesta de Vargas, mientras la investigación continúa. Además del director, también se encuentran privados de libertad el exsupervisor de tránsito aéreo de la Administración de Aeropuertos y Servicios a la Navegación (Aasana), Joons Miguel Teodovich y Gustavo Vargas Villegas, hijo de Vargas Gamboa, quien en 2014, siendo director del Registro Aeronáutico Nacional, autorizó la importación y matrícula provisional del malogrado avión.