Juan Carlos Espinoza: "Huachipato no me deja ir a la UC"

Uno de los aspectos que preocupa a Mario Salas de cara al segundo semestre es  la cantidad de torneos que tendrá que enfrentar con la UC. De eso depende, en gran medida, la conformación del plantel que representará a los estudiantiles después de la Copa América. Sin embargo, la dirigencia cruzada asume que no hay tiempo que perder y ya lleva un par de semanas trabajando en el tema. La idea es elegir y negociar con tiempo para asegurar  nombres lo antes posible.

Uno de los jugadores que llena el gusto del director técnico cruzado es Juan Carlos Espinoza. El lateral fue dirigido por Salas en Huachipato y lo quiere volver a hacer ahora en San Carlos de Apoquindo, sobre todo por la ductilidad que ha mostrado el jugador, quien se acomoda con facilidad a diferentes sistemas de juego y puede actuar tanto por la banda derecha como por la izquierda.

Las conversaciones entre la UC y el propio jugador y su agente han avanzado de manera fructífera. El cuerpo técnico aprobó su llegada y todo parecía encaminarse hacia una negociación exitosa. Sin embargo, la cláusula de US $ 250 mil, estipulada por contrato en caso de que algún equipo quisiera hacerse con sus servicios y cuyo pago ya fue aprobado por la dirigencia estudiantil, es ahora desconocida por Huachipato.

Al menos esa es la acusación de Espinoza, quien asegura que firmó dicha disposición contractual en junio de 2014. En ese entonces, la administración del club aún no estaba a cargo de la concesionaria que la rige actualmente. Ahora, en ese contexto, la actual dirigencia desconoce dicho acápite y advierte que no está respaldado en la ANFP, lo que le resta validez. Eso sí, reconocen que hay un acuerdo para que el jugador deje el club, pero por el doble del monto para la misma fracción de sus derechos económicos, vale decir, US $ 500 mil por la mitad del pase.

Esta situación incomoda al futbolista, quien quiere llegar a San Carlos de Apoquindo y apela a la cláusula inicial para partir a Santiago. "Huachipato sabe que hay una cláusula. Con esa condición firmamos la extensión de contrato a mediados del año pasado. No sé ni entiendo por qué ahora la niegan. Ellos conocen la oferta de Universidad Católica", asegura el defensor.

"Le tengo mucho cariño a Huachipato, pero llegó el momento de partir y asumir nuevos desafíos. Los ciclos se cumplen y ellos (Huachipato) no me dejan ir a la UC. Por eso, siento que no se está valorando lo que he hecho por el club", agrega el futbolista de 23 años, quien recuerda su relación con Mario Salas. "Siempre nos hemos llevado bien. Él sabe lo que puedo entregarle. Cuando trabajamos juntos, me pedía cosas y me corregía otras. Lo que más destaco de él es su estilo y que nunca deja ningún detalle al azar. Es un técnico ganador".

A partir del acuerdo con el jugador, en la UC no están dispuestos a pagar más por él. Quienes llevan la negociación apelan a la flexibilidad de Huachipato para finalmente concretar la operación.