El tercer lugar de Chile en el Mundial que organizó en 1962, había dejado la vara alta. Por eso, la Selección que se aprestaba a disputar el Mundial de Inglaterra en 1966 tenía grandes esperanzas.
En la cita planetaria, la Roja compartió el Grupo D con Italia, Corea del Norte y Unión Soviética. Y el combinado nacional apenas logró un punto.
"Obviamente el balance es negativo. No cumplimos las expectativas que nos habíamos trazado. Uno de los errores nuestros fue haber mirado en menos a Corea del Norte", sostiene Elías Figueroa, quien, con 19 años, debutaba en una Copa del Mundo.
Figueroa, quien por entonces era menor de edad (se debía tener 21), debió viajar a Inglaterra con permiso notarial. "Ya estaba casado, entonces ya no dependía de mis padres, por lo que ellos no me podían dar la autorización. Al final, un juez de menores me firmó el papel notarial para poder viajar", explica Don Elías.
En la cancha, los dirigidos por Luis Alamos no estuvieron a la altura. En el debut ante Italia, cayeron por 2-0, en un encuentro recordado por la revancha de La Batalla de Santiago, que habían protagonizado las mismas selecciones cuatro años antes, en el Estadio Nacional. La excesiva rudeza lo ubicó entre los duelos más violentos en la historia de los mundiales.
"El día que enfrentamos a Italia, llovía de una manera increíble. Nosotros no estábamos acostumbrados a eso, ya que en Chile apenas llovía se suspendían los duelos", rememora Humberto Cruz.
Después del duelo con la Azzurra, crecieron las dudas en el arco, básicamente porque Adán Godoy, quien iba a ser titular, se lesionó tres días antes del debut copero, y su reemplazante, Juan Olivares, presentaba problemas en un tobillo desde hacía varias semanas.
"Olivares jugó lesionado toda la Copa. Y Godoy no podía hacerlo, también por lesión. No teníamos un tercer arquero", añade Cruz.
Luego, Chile empató 1-1 con Corea del Norte en un curioso partido. "Estamos seguros de que ellos cambiaron a todo el equipo en el entretiempo. Es que todos eran iguales", afirma Figueroa.
El tercer compromiso, frente a los soviéticos, con la Roja ya eliminada, se jugó solamente por cumplir. ¿Resultado? Derrota por 2-1.
Cuando quedaban pocos meses para que jugáramos el Mundial de Inglaterra, en el plantel de la Selección pensábamos que íbamos a superar lo hecho hace cuatro años, con el tercer lugar de 1962. Es que teníamos muy buenos jugadores. Pero no.
Las cosas empezaron mal camino a Inglaterra. Ya sin Fernando Riera, Francisco Hormazábal lo reemplazó, pero este fue sustituido por Luis Alamos. Esos sucesivos cambios de técnicos no fueron buenos, ya que estábamos acostumbrados a jugar con un esquema definido (4-2-4) y este fue modificado por un 4-3-3.
Ya en el Mundial, Alamos hacía reiterados cambios en la formación; entrenaba un equipo y terminaba jugando otro. O una hora antes del partido, daba la formación y esta tenía muchas sorpresas. Eso provocó mucha desconfianza entre nosotros.
Ello se suma a que la concentración previa al Mundial comenzó tres meses antes. Jugamos en Estados Unidos, Francia y Alemania y después viajamos a Inglaterra
LAS MEJORES IMÁGENES DE CHILE EN INGLATERRA 1966