La oficina del Alto Comisionado de la ONU para los derechos humanos condenó hoy la ejecución del mexicano Ramiro Hernández Llanas, realizada el 9 de abril, y sostuvo que Estados Unidos violó el derecho internacional al no haberle concedido acceso a servicios consulares. "No es sólo un caso, es el último de varios casos similares que afectan a mexicanos", dijo el portavoz del Alto Comisionado, Rupert Colville, agregando que "Estados Unidos está violando la Convención", dijo.

La Convención de Viena, ratificada por 175 países incluido Estados Unidos, prevé que todo extranjero debe recibir asistencia de sus representantes  consulares tras ser informado de sus derechos. Sin embargo, el estado de Texas niega este derecho a reclusos mexicanos, lo que ha despertado la condena de la ONU y de activistas de derechos humanos.

Hernández, de 44 años, quien había sido condenado a la pena capital en 2000 por asesinato, fue ejecutado con una inyección letal en una prisión del estado de Texas.

En tanto, en varias ocasiones, Washington ha afirmado que el derecho internacional no se aplica a los sistemas de justicia de los 50 estados de Estados Unidos, pero Colville dijo que este argumento no era válido.