Un paciente internado en una clínica en el centro de Israel, quemó viva a una enfermera por no estar satisfecho con el trato recibido, según indicó la policía.

El sospechoso, de más de 70 años, huyó del centro médico de Jolón, al sureste de Tel Aviv, en su auto antes de ser detenido, detalló la policía.

"Según los primeros elementos de los que disponemos (el sospechoso) no estaba satisfecho y durante una conversación vertió líquido inflamable sobre la enfermera que lo cuidaba", indicó un oficial de policía citado en el portal de noticias Ynet.

A causas de las quemaduras, la enfermera de unos 40 años murió.

El director de los servicios de salud de la clínica, hizo una declaración en la radio pública israelí, diciendo que el paciente era conocido por su "pasado médico", dando a entender que sufre de problemas mentales.