El Ministerio de Justicia de Siria rechazó este miércoles el informe de Amnistí­a Internacional que denunció que unas 13.000 personas fueron ahorcadas en cinco años por orden del gobierno en una cárcel próximo a Damasco, y calificó las acusaciones de "totalmente falsas" y de formar parte de una campaña de desprestigio.

La agencia de noticias estatal siria difundió el comunicado ministerial este miércoles, un día después de la publicación del reporte elaborado por el grupo internacional de defensa de los derechos humanos.

Medios de comunicación "engañosos y provocadores" publicaron el informe de Amnistí­a con la intención de manchar la reputación del gobierno sirio a nivel mundial, especialmente tras sus recientes "victorias militares contra grupos terroristas", dijo la nota.

Las alegaciones son "infundadas" porque las ejecuciones en Siria siguen el debido proceso y las distintas fases de un litigio, explicó el ministerio.

En su informe, Amnistí­a Internacional dijo que las ví­ctimas, en su mayorí­a civiles, fueron ajusticiadas tras procesos militares que duraron apenas minutos.