Señor director:

Su diario informó sobre el estudio encargado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) a la consultora de Pablo Trivelli, que arroja la cifra de 544 hectáreas de suelo existentes en Santiago, fácilmente convertibles en suelo residencial para proyectos de interés social.

Trescientas de esas hectáreas son de propiedad fiscal, ubicadas en zonas de buena calidad, cercanas al centro. Teóricamente, a una tasa de densidad habitacional de 300 habitantes por hectárea, ello implicaría alojar a 90 mil personas en proyectos residenciales de interés social, cuyo suelo no le costaría nada al Estado, lo cual reduce ostensiblemente los costos de producción de la vivienda.

Con este estudio queda en evidencia que la idea de que no existe suelo urbano para alojar a familias de bajos ingresos en la ciudad es una falacia, siempre que existan verdaderas intenciones del sector público por asumir la gestión inmobiliaria y revertir los elevados precios de las viviendas en general, y la mala localización y déficit de aquellas de interés público. Felicitaciones al Minvu por esta gestión.

Ernesto López Morales

Departamento de Urbanismo

Universidad de Chile