Nunca se apaga ni se gasta, porque se fabrica un armazón hueco dentro del que se quema una vela cualquiera.

Materiales

• Molde cuadrado

• Parafina só­lida

• Estearina para mez­clar con la parafina

• Pigmento en polvo color ver­­de lima

• Silico­na para ba­ñar el interior del molde

• Cau­tín

• Una placa de vidrio pintada (en este caso fue fundida por Mónica)

• Plan­cha

• Cuchillo cartonero o tip top

Instrucciones

1. Sella el agujero inferior del molde con una pelotita de plasticina pa­­ra que no se escurra por ahí la parafina derretida.

2. Rocía con desmoldante (silicona en spray) la parte interior del mol­­de para poder sacar la vela.

3. Pon el molde sobre una capa de piedrecillas para permitir que se mantenga en equilibrio perfecto y vacía dentro de él un poco de pa­­rafina sólida previamente calentada a bañomaría a 70 grados y te­­ñida con pigmento verde lima.

4. Deja cuajar la cera hasta que se comience a enfriar y notes que alrededor del molde se ha formado una pared de un grosor apro­ximado de 1 cm. Con un cuchillo cartonero haz un cuadrado a 1 cm. de distancia de las paredes del molde.

5. Desprende y saca la tapa cuidadosamente. Dentro podrás ver la parafina aún líquida.

6. Vacía cuidadosamente la parafina aún líquida dentro de un tarro y verifica la oquedad de la vela. Ésta quedó perfecta.

7. Desmolda cuidadosamente dando golpecitos al molde para facili­tar el despegue.

8. Superpon el vidrio fusionado y marque el contorno con el tip top.

9. Caliente el cautín y haz un hoyo en el centro del rectángulo mar­­cado. Con el cautín caliente agrande progresivamente la venta­na en la que irá el vidrio.

10. Ajust el vidrio y con una cuchara añade parte de la cera del mis­mo color que le sobró del interior de la vela, para cubrir completamente el borde del vidrio.

11. Alisa el parche con la plancha caliente para que la superficie que­de tan lisa y brillante como el resto de la vela.

12. Ayúdate con el cautín para emparejar las caras interiores de la ve­la.