Cómo tomar decisiones difíciles en una relación de pareja, según una especialista

Cómo tomar decisiones difíciles en una relación de pareja, según una especialista. Foto: Relationship Counseling Group.

¿Cómo le puedes decir a tu pareja que no quieres que vivan juntos? ¿Deberías confesarle que tuviste una aventura? Ese tipo de preguntas es la que Yael Schonbrun, PhD y psicóloga clínica de la Universidad de Brown recibe en su consulta día a día.


Las relaciones de pareja son complicadas. Ese amor perfecto que vemos en las películas románticas suele ser muy distinto al que se vive en la realidad. Fuera de las pantallas, es normal que existan diferencias entre dos personas que lleven a la necesidad de tomar decisiones difíciles.

¿Cómo le puedes decir a tu pareja que no quieres que vivan juntos? ¿Deberías confesarle que tuviste una aventura? Ese tipo de preguntas es la que Yael Schonbrun, PhD y psicóloga clínica de la Universidad de Brown recibe en su consulta día a día.

“Un limbo de decisión”, le llama la experta, pues no poder tomar decisiones complicadas “no es un problema de relación, es humano (...) Enfrentar una decisión dolorosa o aterradora sobre nuestras relaciones es estresante”, explicó la experta en The Washington Post.

Entonces, ¿qué pueden hacer las parejas en estas situaciones? Estas son las herramientas que la psicóloga y terapeuta de parejas propone.

Cómo tomar decisiones difíciles en una relación de pareja, según una especialista

1. Pensar más lento, antes de actuar

Existen dos formas de pensar, según científicos de decisiones como el premio Nobel, Daniel Kahneman: el pensamiento intuitivo rápido —para cuando estamos ante un peligro inminente— y el pensamiento más deliberado.

Este último es más útil a la hora de resolver una decisión compleja. Por esto, es preferible bajar la velocidad y pensar más las cosas, dejando que pase el pensamiento intuitivo, para convertirse en uno más deliberado y lógico.

Para hacer esto, se recomienda aclarar qué es lo más importante, consultar fuentes confiables y explorar qué consecuencias podría tener la decisión a tomar.

2. Entender qué valores te importan

“Las emociones van y vienen, pero los valores ofrecen una guía constante que nos recuerda el tipo de personas que más queremos ser en un rol, contexto o momento determinado (...) Mientras tratas de tomar una decisión difícil, pregúntate: ¿Qué quiero representar?”, dijo la experta.

Por ejemplo, la psicóloga contó que una pareja acudió a ella para decidir si valía la pena salvar su matrimonio. A cada uno le costó identificar qué cosas apreciaban del otro, además de que se evitaban en casa, no habían tenido encuentros en años y no sentían que tuvieran algo en común, excepto sus dos hijos.

Pero el divorcio no era una opción para ellos, pues no solo afectaría a sus hijos, sino que tendría un impacto económico y social en la pareja. Fue así como llegaron al valor de intentar fomentar una mayor satisfacción individual por medio año, para finalmente decidir si se iban a separar o no.

El tiempo pasó y decidieron divorciarse. Descubrieron que su felicidad y capacidad de ser padres mejoró mientras vivían separados.

Cómo tomar decisiones difíciles en una relación de pareja, según una especialista

3. Replantear tu pregunta

Al tomar una decisión difícil, hay quienes enmarcan un problema en algo simple, como elegir entre “esto o lo otro”, “quedarse o irse”, “revelar o mantener en secreto”, “acercarse o evitar”. Sin embargo, la psicóloga explicó que si solo hay dos opciones, el problema está en la forma en que se plantea la pregunta.

En lugar de decir: ¿Nos divorciamos o seguimos infelizmente casados?, se puede replantear y establecer ¿cómo podemos ser más felices como individuos y padres?

4. Tomar decisiones, en lugar de dejarlas fluir

Después de tomar una decisión, incluso si las opciones no fueron buenas, es positivo pensar que “elegiste lo que parecía ser el mejor camino, y eso puede ayudar a seguir adelante”.

Por ejemplo, las parejas que deciden vivir juntas antes o en lugar de casarse, suelen tomar una decisión deliberada juntos, en lugar de que las cosas “fluyan” hacia esa toma de decisión, como cuando es más conveniente vivir juntos y por eso toman esa gran elección.

Por esto, la investigación refleja que las parejas que toman una decisión deliberada juntos, tienden a tener mejores resultados con el tiempo que las parejas que se “deslizan” hacia una elección importante.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.