Esta semana el Banco Central publicó las cuentas nacionales por sector institucional. En el informe el instituto emisor destacó que el stock de deuda de los hogares alcanzó al 72,2% del PIB, un alza de 0,8 pp por sobre el primer trimestre.

Además, explicó que "por sector, la mayor posición deudora de la economía respondió en mayor medida al deterioro de la posición de Hogares y de Empresas no financieras", agregando que los "hogares disminuyeron su riqueza financiera neta con relación a su ingreso disponible en 0,8pp, hasta 193,4%, explicado fundamentalmente por un incremento de los préstamos, y por una menor tenencia de cuotas de fondos y participaciones de capital".

Estos resultados contrastan con las conclusiones que efectuó el Banco Central hace algunas semanas como consecuencia de la publicación de la Encuesta Financiera de Hogares donde, según el estudio, se constató una caída en la cantidad de hogares endeudados (en relación a 2014) y que fue atribuida a que los hogares chilenos están siendo más responsables en cuanto a sus finanzas.

Tampoco calzan del todo las cifras de deuda informal, que según la Encuesta Financiera Hogares permaneció estable en torno al 7% en 2017. Otras mediciones, en cambio, habían indicado hace algunos meses que ese tipo de financiamiento mostraba una clara tendencia alcista (hasta en torno al 15%), lo que se encontraba en línea con un avance de la desbancarización.

De acuerdo con la Superintendencia de Bancos, los datos muestran que a noviembre de 2017 las personas excluidas del sistema crediticio formal tras la puesta en marcha de la baja en la Tasa Máxima Convencional están en el rango de entre 205 mil y 275 mil.

Dado lo anterior, sería conveniente que haya una mejor explicación respecto de la situación financiera de los hogares, considerando que desde la misma entidad surgen datos que a simple vista pueden parecer contradictorios.P