Las grandes compañías que transan en bolsa y forman parte del principal índice bursátil, Ipsa, adoptaron medidas durante el año pasado para hacer frente a la pandemia que, por varios episodios, detuvo la actividad nacional. Así, la reducción de gastos fue la norma general.

En el año los ingresos acumulados registraron una caída de 6,6% (las 24 empresas que hasta el viernes habían informado), mientras los costos bajaron 5,4% y los gastos de administración lo hicieron 3,5%, lo que redundó en una estrepitosa baja de 60% en las utilidades.

Pero en el cuarto trimestre la foto fue distinta. En los últimos tres meses del año los ingresos subieron 1,2%, mientras los costos de venta quedaron planos y los gastos de administración retrocedieron 9,9%. Así, las empresas en conjunto han reportado un aumento de 38% en sus ganancias.

¿Cómo se traducen estos números? Al apriete del cinturón sirvió para, finalmente, mejorar el margen del negocio en la mayoría, alivianar la carga y quedar más eficientes.

Falabella, por ejemplo, informó que su margen operacional en Chile en la línea de tiendas por departamentos pasó de 1,3% en el cuarto trimestre de 2019 a 8,4% en igual periodo de 2020. En el área del Mejoramiento del hogar pasó de -0,1% a 12,6% y en Supermercados de -2,2% a 6,2%.

“El resultado operacional de la compañía durante el cuarto trimestre alcanzó MM$348.088, lo que representa un crecimiento del 96,6% respecto al resultado del cuarto trimestre de 2019. Esto, explicado principalmente por una mayor contribución de margen bruto de los formatos de retail”, detalló la entidad.

En CMPC, por ejemplo, el margen Ebitda pasó de 16,2% en el cuarto trimestre de 2019 a 18,3% en igual lapso de 2020, pese a los mayores gastos de administración y costos operacionales en el área de Softys.

Otro retailer, Cencosud, también mostró un mejor desempeño. “El Ebitda ajustado creció 74,2% y el margen se expandió 402 puntos base, reflejando tanto eficiencias operacionales como mejoras en el mix de ventas de las distintas unidades de negocio”, detalló en su análisis razonado. En el rubro supermercado, Cencosud explicó que la menor actividad promocional –por una mayor demanda- fue un elemento clave en este mayor margen, así como mejor uso de las mermas y reducción de gastos.

¿Mayor eficiencia para 2021?

Esta mejora en eficiencia permite prever que se puede extender en los próximos trimestres.

Carlo Solari, presidente del retailer, explicó en una reciente entrevista concedida a Pulso que los recortes de gastos, simplificación y agilización de la compañía significaron reducir más de US$150 millones de costos por una sola vez y generarán ahorros anuales por unos US$170 millones en adelante.

Guillermo Araya, analista de Renta 4, comenta que “Es relativamente normal que las empresas lleven a cabo programas de reducción de costos en épocas de crisis. Pues en períodos de auge pasa a ser más importante que los costos, ganar participaciones de mercado o crecer cuanto sea posible, aunque los costos se incrementen, se crecerá en capital físico o humano hasta la utilidad marginal del último peso gastado se iguale al costo marginal”. Sin embargo, en tiempos de crisis, se debe bajar el costo marginal al nivel más bajo posible, acota, y cuando se produce la recuperación, “no se invertirá en capital físico o humano hasta que exista la certeza absoluta que es necesario y en ese periodo se maximiza el diferencial entre utilidad marginal y costo marginal”.

Es así que Araya concluye que las empresas se vuelven muy eficientes, aunque advierte que deben estar atentos al punto de la recuperación, para anticiparse y estar preparados. “Aquellos que se arriesgan antes, si es que efectivamente se produce la recuperación, consiguen ganar participaciones de mercado que implican rentabilidad en el largo plazo”.