La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el jueves “la represión y el uso de la fuerza” por parte del gobierno de Cuba en las protestas “sociales pacíficas” iniciadas el pasado domingo en el país caribeño.

En un comunicado, la CIDH recopiló la información en torno a estas movilizaciones y llamó al régimen castrista a cumplir con el Derecho Internacional así como ha reiterado su posición de poner fin al bloqueo de Estados Unidos sobre la isla.

Para la CIDH, el gobierno de la isla debe “garantizar integralmente el derecho a la protesta y de otros derechos” y “entablar un diálogo (...) para atender las demandas de la población”.

Resulta fundamental que Cuba cese su distanciamiento y habitual ausencia con respecto a los sistemas internacionales de derechos humanos que están abiertos al diálogo y a la asistencia técnica para la garantía de los derechos humanos en la isla”, declaró el organismo.

Asimismo, “en el contexto de la grave crisis económica y social que transita el país”, se ha referido al bloqueo económico de Estados Unidos para pedir su fin ya que los derechos humanos se “ven afectados como consecuencia del mismo”, si bien ha precisado que el bloqueo “no exime al gobierno de Cuba de cumplir con sus obligaciones internacionales”.

Miles de ciudadanos cubanos han salido a las calles en los últimos días para expresar su descontento por la carestía de productos básicos, como alimentos y medicinas, y miembros de la comunidad internacional y ONG, entre otros, han denunciado una dura represión contra los manifestantes.

Por su parte, el gobierno de Cuba ha negado que las protestas sean un “estallido social” y acusó a Washington de destinar “cientos de millones de dólares” a “la subversión”.