Una discreta actuación tuvo Alexis Sánchez en el agónico triunfo 2-1 de Barcelona ante Celtic de Escocia, por la Liga de Campeones de Europa.

Si bien el chileno tuvo un par de ocasiones para llegar al gol, lo cierto es que nuevamente el tocopillano tuvo un opaco desempeño pese a tener la confianza de haber iniciado como titular. De hecho, fue reemplazado a los 79' por David Villa.

Al comienzo del partido, parecía que Barcelona volvería a ser una tromba en su estadio. De hecho, ya a los dos minutos Sánchez tuvo la ocasión más clara para abrir la cuenta, pero su remate terminó desviado cuando el portero de Celtic era su único obstáculo.

Pero esa oportunidad marrada le costaría caro al Barcelona. Y nuevamente Sánchez sería protagonista: un foul del "Niño Maravilla" derivó en un tiro libre que Javier Mascherano envió de cabeza hacia su propio arco. A los 18', la visita ganaba sorpresivamente en territorio catalán.

Barcelona siguió atacando, pero no tuvo mayor claridad. La defensa escocesa defendía de buena forma. Hasta el minuto 45', cuando una gran jugada colectiva fue finalizada por Andrés Iniesta. Era la igualdad que dejaba el partido abierto para la segunda etapa.

En el complemento, Celtic pudo anotar el segundo con un cabezazo de Wanyama que se fue apenas desviado. Barcelona, por su parte, era incapaz de imponer su jerarquía, con un Lionel Messi muy apagado en esta oportunidad.

Tampoco ayudaban mucho sus compañeros, quienes a ratos mostraron una -a estas alturas- inusual imprecisión en los pases.

Aunque a los 68', una buena jugada colectiva iniciada por Alexis Sánchez terminó con un remate a quemarropa de Lionel Messi, pero que el portero Fraser Forster atajó de manera brillante.

A los 74', Sánchez pudo anotar nuevamente pero el arquero estuvo fenomenal para achicar. Y un minuto después, el golero detuvo un cabezazo de Messi. A esas alturas, los culés buscaban desesperadamente el segundo.

De ahí en adelante, la defensa de Celtic se convertía en una muralla infranqueable ante un Barcelona que desesperadamente intentaba conseguir el triunfo.

Eso sí, a los 90' David Villa estrelló un derechazo en el vertical. Era el gol del triunfo que finalmente llegó en el tercer minuto de descuento gracias a Jordi Alba: el ex jugador de Valencia conectó en el área chica un centro que terminó en una nueva victoria en la Champions.

Así, Barcelona lidera el Grupo G con 9 puntos, escoltado por Celtic con cuatro unidades. Más atrás Aparece Spartak con tres y Benfica con uno.