Católica venció a Palestino en un atractivo duelo en San Carlos
Los cruzados se impusieron por 3-2 a los árabes y subieron al tercer lugar.
Con algunas dudas, pero finalmente con la convicción que acompaña el discurso de su entrenador, Universidad Católica venció por 3-2 a Palestino y avanzó aún más en la tabla del Clausura, donde se ubica en el tercer lugar y con el líder, Universidad de Concepción, perdiendo fuelle partido a partido. Es decir, con el panorama que los directivos e hinchas cruzados esperaban ver con la conducción de Mario Salas.
Palestino, en tanto, mantuvo el buen fútbol que lo ubica entre los mejores del país. Aunque la escuadra de Pablo Guede perdió, lo hizo con bastante más que dignidad, en un apronte de alto tono para su desafío por la Copa Libertadores, el jueves ante Nacional, en Montevideo.
Inicio febril
Nunca como ayer, el término descanso se aplicó mejor a un entretiempo. Felices, en esos 45 minutos iniciales, los hinchas cruzados y árabes que decidieron aprovechar el fresco del anochecer dominical para llegar a San Carlos de Apoquindo. Vieron quizás el período más intenso y mejor jugado en estas primeras seis fechas del campeonato.
Con dinámicas similares, ambos plantearon un ir y venir que impedía sacar la vista del campo; algo se perdía quien revisaba su whatsapp o buscaba a un vendedor de café.
Salas y Guede han estructurado dos equipos que no les temen a los riesgos, que siempre buscan avanzar y crear peligro, aunque muchas veces descuiden su defensa.
Los goles de Leonardo Valencia y Álvaro Ramos fueron un reflejo de eso. En el primer caso (20'), bastó una recuperación y un pase de Agustín Farías para Leonardo Valencia para que los tricolores se pusieran en ventaja. Claro, el volante tiene talento para aprovechar cualquier mano a mano y ayer hizo chocar las limitaciones de Walter Ibáñez y Cristián Álvarez para sacar un disparo bajo. Con eso alcanzó para batir al débil Franco Costanzo.
En el caso de Ramos, fue suficiente un rechazo de cabeza de Ibáñez. El iquiqueño agregó fuerza para dejar por el suelo a Alejandro Contreras y concluyó la tarea con un tiro algo pobre, pero con la potencia justa para pasar a Darío Melo, con el balón dando botes en el arco palestinista.
El ritmo nunca decayó y por eso, a los 49', una jugada algo confusa, luego de un buen desborde de Fernando Cordero, terminó en gol de José Luis Muñoz. Con rebotes y todo, fue una anotación que reflejó el clima del partido: hacia adelante, no importa cómo, pero con entusiasmo máximo.
De cualquier modo, las energías se agotan y eso atenuó parcialmente el vértigo al promediar el segundo tiempo. No tanto, eso sí, como para disminuir las pulsaciones de Salas, quien por segundo encuentro consecutivo fue expulsado debido a sus constantes reclamos. Terminó en una caseta radial, viendo como pasaba de la alegría del 3-1 a la angustia del 3-2 del cierre.
El aumento a favor de los estudiantiles llegó de una falta penal de Germán Lanaro a Cordero, que Darío Bottinellí convirtió con certeza. El nerviosismo postrero llegó con un tiro de Valencia que Costanzo sólo desvío, permitiendo la anotación del joven Marcelo Morales.
El cierre fue tenso, pero nadie podía esperar especulaciones. Al frente estaban dos equipos que enlucen el campeonato. El balón iba y venía, los defensas la pasaban mal para frenar los ataques, los volantes luchaban y los delanteros intentaban sin pausa por causar más daño.
Resumen: es fútbol, lo que muchas veces falta y ayer sobró. Gracias UC, gracias Palestino.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.