En este 71º aniversario de la fundación de la República Popular China, Chile desea sumarse a las celebraciones, transmitiendo al pueblo chino nuestras sinceras felicitaciones. Por ello, creo oportuno desarrollar una breve reflexión sobre las profundas transformaciones que ha experimentado China en los últimos años, refiriéndome a las relaciones sino-chilenas, que el próximo 15 de diciembre cumplen 50 años.

Para el 2020, China ha trazado ambiciosas metas: erradicar la pobreza, que a mitad de la década pasada alcanzaba alrededor de 45 millones de personas; doblar la renta per cápita del 2010; y emprender una serie de reformas para modernizar y abrir la economía, a la vez que enfrentar los desafíos ambientales y sociales. Objetivos que iban acompañados de una estrategia bien planificada para lograr su realización. Es por esa razón que hemos sido testigos, en la última década, como el país se ha encaminado al cumplimiento de estas metas fundamentales.

En el marco de estas transformaciones, Chile y China han fortalecido sus vínculos, con una creciente cooperación bilateral y coincidiendo en temas tan prioritarios como la defensa y fortalecimiento del multilateralismo, el impulso a al libre comercio y la resolución de los conflictos mediante reglas claras y transparentes. Junto a ello, nuestra relación está cimentada sobre la labor de ambos Gobiernos, robustecida por los esfuerzos del mundo empresarial, la academia y la sociedad civil.

Como es sabido, habitualmente se destacan los “cuatro primeros lugares de Chile” respecto a China: 1) haber sido los primeros en América del Sur en establecer relaciones diplomáticas con la República Popular China, en 1970, adhiriendo al principio de “Una sola China”, 2) el primer país de América Latina en apoyar el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio, en 1999, 3) el primer país latinoamericano en reconocer a China como economía de mercado, en 2004; y 4) el primer país, no perteneciente al bloque ASEAN, en suscribir un Tratado de Libre Comercio con China, el 2005. Semejante hitos no son simplemente símbolos, sino que el fiel reflejo de una construcción de confianzas que ha permitido reconocernos como verdaderos socios.

Salvar vidas y enfrentar las dificultades económicas

Inesperadamente, este año tan significativo por corresponder al quincuagésimo aniversario del establecimiento de nuestras relaciones diplomáticas, ha coincidido con la mayor pandemia que hayamos sufrido en un siglo, forzando a nuestros pueblos a realizar ingentes esfuerzos para salvar vidas y enfrentar dificultades económicas sin precedentes.

En ese sentido, hay que reconocer el apoyo brindado por China a nuestro país durante estos meses en la lucha contra la COVID-19. En especial, las importantes donaciones con insumos médicos y sanitarios y a las instituciones públicas y privadas que colaboraron con la campaña solidaria “China ayuda a Chile”, liderada por nuestra Embajada en Beijing. Además son destacables los esfuerzos del Gobierno chino para dar una respuesta sanitaria multilateral, a fin de evitar la paralización de las cadenas de suministro que pusieron en serio riesgo la estabilidad del comercio mundial.

Chile y China han actuado mancomunadamente en la lucha contra esta emergencia sanitaria y para facilitar el intercambio comercial. Ejemplo de lo anterior es la conversación telefónica que mantuvieron los Presidentes Sebastián Piñera y Xi Jinping el pasado 28 de febrero, oportunidad en que, refiriéndose a la lucha global contra la pandemia, reafirmaron su común compromiso con el multilateralismo, el libre comercio y la acción climática.

En esa dirección apuntó la “Declaración Conjunta para Fortalecer la Cooperación en el marco del TLC y Combatir el COVID-19” emitida entre el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile y el Ministerio de Comercio de China, de julio pasado. Asimismo, los Ministerios de Salud y de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de Chile han mantenido un continuo contacto con sus contrapartes chinas, así como con los laboratorios que trabajan en el desarrollo de una vacuna contra el COVID-19. En este marco, el Gobierno de Chile entregó su apoyo al proyecto clínico liderado por la Universidad Católica y la farmacéutica Sinovac Biotech, en el que también participa un consorcio de universidades nacionales y que contó con el apoyo financiero de la Confederación de la Producción y el Comercio.

Próxima apertura de un Consulado General en la ciudad de Chengdu

Sabemos que recuperarnos de los estragos causados por la COVID-19 no será tarea fácil, lo que nos obliga a seguir empeñados en superar esta crisis, rápidamente y a cabalidad. En este contexto, una auspiciosa señal ha sido que nuestras exportaciones a China han aumentado en los primeros meses del año, al totalizar US$ 14.175 millones, un auge de más de 10% respecto al mismo período del 2019.

Dichos esfuerzos se complementan con la próxima apertura de un Consulado General en la ciudad de Chengdu, provincia de Sichuan, región del interior de China que presenta una de las más altas tasas de crecimiento y desarrollo del país, lo que abrirá indudablemente nuevas opciones de negocio.

Igualmente, seguimos trabajando para aumentar la inversión china en nuestro país, incrementar los vínculos en área de innovación y tecnología, así como para abrir nuevos espacios que permitan a ambos pueblos acercarse cada vez más. La amplitud y diversidad de nuestra agenda bilateral hace que podamos pensar la relación sino-chilena con una visión de futuro, proyectándola hacia los próximos 50 años.

Como señalara el Presidente Sebastián Piñera en el marco del viaje oficial que realizó a China en abril de 2019, con China mantenemos un diálogo constructivo y abierto a todas las materias: “China realmente está tomando la delantera en muchas áreas y nosotros estamos mirando de cerca y con interés lo que está haciendo. Ciertamente, tenemos grandes coincidencias, pero también tenemos diferencias, que conversamos con mucha franqueza”. Una visión compartida por el Expresidente y embajador en Misión Especial para el Asia-Pacífico, Eduardo Frei, quien ha destacado que Chile y China “son aliados estratégicos, países que nos respetamos y que seguiremos trabajando para construir las sociedades del futuro, con alta tecnología, con desarrollo tecnológico e inversiones, siempre con sentido de responsabilidad, confianza y armonía”.

Reiteramos nuestras felicitaciones al Gobierno y al pueblo de la República Popular China en este nuevo aniversario de su fundación y le deseamos éxito en la senda hacia un desarrollo pleno.