La periodista Mónica González vuelve a la TV como panelista del próximo programa de La Red, Pauta Libre, el espacio político del canal para 2020, no sólo bajo el contexto del plebiscito del 25 de octubre, sino que también en una arremetida de la pantalla chica por el debate, sumándose a Tolerancia cero (CNN) y A esta hora se improvisa (Canal 13).

Pero aceptar la oferta no fue sencillo para González. “Me costó, porque no soy de televisión, encuentro que está muy polarizado el clima”, advierte. Lo que inclinó la balanza hacia el proyecto fue por un lado que el panel estará solo integrado por mujeres. “Estamos en un momento en que el aporte femenino se necesita y se aprecia, tanto en el mundo como en Chile. Es un incentivo muy interesante”, dice la profesional, Premio Nacional de Periodismo 2019. Su colega, Alejandra Matus, es otra de las convocadas, mientras que el tercer nombre se anunciará en los próximos días.

Otra razón que la motivó fue la presencia del periodista José Antonio Neme, quien se hará cargo de la conducción. Pauta Libre debutará el domingo 23 de agosto a las 13.00 horas, con el resto de la competencia iniciando sus respectivas emisiones en días cercanos: mientras A esta hora... parte este lunes 17 (22.30 horas), Tolerancia Cero -donde González fue panelista en 2015, siendo la primera mujer en ese rol- lo hará el mismo 23 a las 22.30.

Sobre este fenómeno, comenta: “Me parece excelente. Primero, estamos en medio de una crisis política muy severa, que es la que está en el cimiento de las otras crisis que estamos viviendo, que son bien fuertes. Y además tenemos una elección el 25 de octubre. Es muy importante que la gente vote, que la gente decida, y que retomemos la exigencia de la ciudadanía por elevar el nivel del debate político, que siento está todavía en un nivel bastante bajo”.

Con este programa, por otro lado, González vuelve a la televisión después de integrar Mesa Central, de Canal 13, donde estuvo hasta fines de mayo. “Tampoco quiero hablar mucho de eso porque da pudor, pero sí, fue una experiencia, todas las experiencias aportan, sirven, y yo pensaba que ya no quería televisión y esto me entusiasmó de nuevo”.

Y aunque no se siente una figura de TV, ha tenido una constante presencia en la pantalla tras el estallido social, siendo por ejemplo invitada recurrente en el matinal Mucho Gusto de Mega. Sobre esa experiencia, profundiza: “Fue muy linda, me trataron con mucho respeto, y se abrieron a temas a los que no se habían abierto antes, jamás, como los responsables de la corrupción dura en Chile, porque creo que ese es un tema que ha sido muy mal tratado, porque hay muchos intereses creados”.

Respecto a estos espacios en general, pone su ojo crítico: “Me parece patético ver a las mismas personas que se repiten. Tu no puedes poner a (Joaquín) Lavín y a Francisco Vidal siempre, es absurdo. Me ha impactado muchísimo”.