El astrónomo y profesor de la Universidad Estatal de Moscú, Vladímir Surdín, aseguró que el fenómeno se trató de un meteorito y que se desintegró en su trayecto aéreo.

Según testigos, la bola de fuego también se vio desde la ciudad de Zheleznogorsk, ubicada a 50 kilómetros al noreste de Krasnoyarsk. "Vimos en el cielo una llama repentina, parecida a la cola que dejan los aviones. En tres segundos hubo una explosión y pudimos ver cómo se desintegró", señaló uno de los residentes.