El gobierno brasileño anunció este viernes que “cerrará las fronteras aéreas” desde el próximo lunes a seis países de África para evitar la propagación de la nueva variante de coronavirus, denominada Omicron.

“Vamos a resguardar a los brasileños en esta nueva fase de la pandemia”, indicó en Twitter el jefe de Gabinete, Ciro Nogueira, tras una reunión entre varios ministerios para atender la situación.

Según detalló, la restricción que se oficializará este sábado “alcanzará a pasajeros procedentes de” Sudáfrica, Botsuana, Esuatini, Lesoto, Namibia y Zimbabue, ubicados en el sur del continente, donde se detectó la variante por primera vez.

Más temprano este viernes, el regulador sanitario brasileño, Anvisa, había instado a tomar medidas ante la nueva cepa: “Considerando el impacto epidemiológico que la nueva variante podría tener en el escenario mundial (...) se recomienda la inmediata suspensión de todos los vuelos procedentes” de los seis países implicados.

El presidente Jair Bolsonaro prometió la tarde del viernes “medidas racionales” para contener el ingreso al país de la nueva variante, luego de descartar el cierre de aeropuertos.

Anvisa también recomendó la “suspensión temporaria de la autorización para desembarcar en Brasil a extranjeros que hayan transitado por esos países en los últimos 14 días” y una cuarentena a los brasileños que estén regresando de esa región de África.

El mensaje de Nogueira no especificó sobre esos puntos.

La restricción de vuelos fue decidida en forma conjunta por la jefatura de Gabinete y los ministerios de Salud, Infraestructura, Justicia.