Valeria Cornejo, profesora de 36 años, habría sufrido una "hipoglucemia" por no tomar sus medicamentos para la diabetes tipo 1 y lupus que padecía,  mientras estaba en compañía de su pareja, el sacerdote Carlos Scarlata. La Justicia argentina está investigando el hecho para confirmar si él falló en ayudar a la víctima con el fin de ocultar su relación.

Scarlata es el mismo sacerdote que en 2016 dio indicaciones a las mujeres sobre cómo debían vestirse y prohibió el ingreso a su parroquia si vestían con calzas, las musculosas y shorts porque -manifestó- las mujeres que se visten de esa manera "están excitando a los hombres", según detalla el medio argentino Clarín.

La denuncia fue presentada por una amiga de la fallecida, la que aportó a la investigación con un audio y conversaciones en Facebook -en los que supuestamente el clérigo señalaría que la mujer pudo haber padecido de un coma diabético- para demostrar que Scarlata estuvo con Cornejo días antes de que fuera encontrada muerta en la casa que él mismo habría alquilado para reunirse con ella.

El fiscal encargado del caso, Javier Giaroli, afirmó que el "señor Scarlata sabía las enfermedades que padecía, sabía la medicación que consumía y las consecuencia de no consumir la medicación, el reproche penal es por retirarse sin dar aviso alguno".

Cuando se tomó la declaración al sacerdote el viernes pasado, Scarlata admitió que mantuvo una relación de pareja con Valeria Cornejo y que, el día 19 de octubre (un día antes de que se viera a la docente con vida por última vez) fue a su casa, pero al no tener respuesta de la mujer, se habría retirado del lugar.

Si bien el clérigo no está imputado y mientras la Justicia continúa con la investigación, el Obispado de San Rafael, de quien depende el sacerdote, ha decidido la "suspensión del P. Scarlata, como medida cautelar, de todas las facultades ministeriales".