La ofensiva diplomática internacional para detener los bombardeos del ejército israelí en Gaza y las salvas de cohetes palestinos sobre Israel se intensificó este martes, mientras los ataques siguen a un ritmo frenético.

El enfrentamiento también se cristalizó en torno a la apertura de un punto de paso hacia Gaza, destinado a hacer entrar en el enclave una primera entrega de ayuda humanitaria, “indispensable tras nueve días de crisis” según la ONU.

Pero el cruce de Kerem Shalom solo se abrió durante unas horas y luego fue cerrado por Israel tras el lanzamiento de proyectiles palestinos.

En Cisjordania, tras la convocatoria de una huelga general por parte del partido Fatah de Mahmud Abas, los comercios y las escuelas de Ramala y otras ciudades permanecieron cerrados el martes. El llamamiento tuvo eco en las ciudades árabes israelíes y en las ciudades “mixtas” de Israel, donde las tensiones entre judíos y árabes siguen siendo elevadas.

En Jerusalén Este se produjeron varios enfrentamientos entre palestinos y fuerzas de seguridad israelíes, que utilizaron cañones de agua y detuvieron a varios manifestantes.

Desde que empezó el conflicto, el 10 de mayo, 213 palestinos -entre ellos al menos 61 niños- han muerto en Gaza y más de 1.400 han resultado heridos.

En Israel, 12 personas murieron (entre ellas, un niño) y 294 resultaron heridas por el lanzamiento de cohetes.

Llamado a un cese al juego

El presidente estadounidense, Joe Biden, acusado por su propio partido de falta de firmeza frente a Israel, expresó el lunes su apoyo a un “alto el fuego”, en una nueva llamada telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

“Nuestra línea es seguir atacando objetivos terroristas”, recalcó Netanyahu.

El movimiento islamista Hamás, en el poder en la Franja de Gaza, amenazó con disparar más cohetes contra Tel Aviv si la aviación israelí “no deja de apuntar a civiles”. Decenas de sus misiles cayeron sobre el sur de Israel.

El ejército israelí afirma haber apuntado a lo que denomina “el metro” -túneles subterráneos que permiten al movimiento islamista trasladar sus municiones- y a las casas de comandantes de Hamás, porque asegura que “almacenaban armas”.

El rey de Jordania, Abdalá II, y la canciller alemana, Angela Merkel, llamaron este martes a un “rápido” alto el fuego en el conflicto entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, anunció el vocero de la jefa del gobierno alemán.

“Acordaron que hay que apoyar las iniciativas para un rápido alto el fuego con el fin de crear las condiciones para la reanudación de las negociaciones políticas”, indicó el vocero Steffen Seibert en un comunicado.

El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, consideró este martes como una prioridad lograr un “cese inmediato” de la violencia y la “implementación de un cese del fuego” entre israelíes y palestinos.

“La prioridad es el cese inmediato de toda la violencia y la implementación de un cese del fuego. No apenas acordar sino implementar un cese del fuego”, dijo Borrell al fin de una videoconferencia informal de cancilleres de la UE para discutir esta crisis.