Cambiemos en 2015 y Juntos por el Cambio en 2019 fueron las dos alianzas que creó el partido del expresidente Mauricio Macri (PRO), con otras fuerzas políticas como la Unión Cívica Radical (UCR). Pese a ello, el exdiputado de los radicales, e hijo del fallecido expresidente argentino Raúl Alfonsín (1983-1989), Ricardo Alfonsín, se ha mostrado distante y crítico de dicha coalición. En medio de su visita a Chile para participar del Foro Latinoamericano de DD.HH., el político argentino reconoce a La Tercera que durante el gobierno de Macri los radicales cometieron un error y actuaron "como si hubiéramos puesto en suspenso nuestra identidad (...). No era la mejor manera de contribuir, decir a todo que sí".

Sin embargo, Alfonsín sí es optimista frente al actual gobierno peronista: "Ahora sí la sociedad percibe que está gobernando un partido que no cree que la solución de los problemas económicos se resuelven solo en el mercado".

Usted se ha mostrado crítico de la alianza de su partido y el PRO, del expresidente Macri. ¿Cuáles son las razones de esas críticas?

Nosotros habíamos dicho que en el caso de que no nos tocara, al radicalismo, poner al candidato a Presidente, actuaríamos siendo muy consecuentes con nuestras ideas. Trataríamos de influir en el rumbo de la gestión, en la elaboración de las decisiones, que no acompañaríamos decisiones que creyéramos nosotros que eran equivocadas. Bueno, mis críticas tienen que ver con el hecho de que no hicimos absolutamente nada de eso. Actuamos como si hubiéramos puesto en suspenso nuestra identidad, como si hubiéramos sido convidados de piedra. Yo advertía que esa no era la mejor manera de contribuir, decir a todo que sí, y que si seguíamos actuando así -al inicio del gobierno del PRO- seguramente los problemas no se iban a resolver, razón por la cual se iban a perder las elecciones. Y eso fue lo que ocurrió.

¿Cómo describiría usted los cuatro años del macrismo en el poder?

Lamentablemente, después de cuatro años el balance que tenemos que hacer es negativo. Los principales problemas de 2015 no solo no se resolvieron, tampoco mejoraron. Es más, empeoraron, se agravaron. Más inflación, más desempleo, más recesión, más pobreza, más indigencia, más deuda, cepos cambiarios, en fin... No se registró una mejoría, y por eso se perdieron las elecciones. Eso fue consecuencia de que el PRO tomó decisiones hacia la idea de que lo mejor que pueden hacer los gobiernos con la economía de un país es meterse lo menos posible con ella, dejar que actúe el mercado. La Unión Cívica Radical no pensaba eso, ni piensa eso, pero se subordinó por el hecho de que había perdido las PASO.

Usted ha confirmado que en el gobierno de Alberto Fernández le ofrecieron un cargo. ¿Cuál es su cercanía con el actual Mandatario?

Yo dialogo con todos, no soy de los que creen que la mejor manera de resolver los problemas es sin diálogo, con grieta. Tengo muy buena relación con todos y también con Alberto Fernández, y no solo desde que es candidato. Con anterioridad nos habíamos reunido y habíamos conversado, y habíamos coincidido en muchísimas cosas importantes respecto de lo que había que hacer con Argentina: dialogar, reafirmar valores republicanos fundamentales, terminar con la grieta y cambiar el rumbo de la economía.

¿Cuál es su evaluación del mes y medio que ya lleva el gobierno de Alberto Fernández?

Yo estoy con un intranquilo optimismo. Le digo intranquilo porque la situación es muy difícil, es más compleja que la que existía el año 2015. Se va a ir avanzado progresivamente. Por otro lado, soy optimista porque creo que efectivamente las decisiones que se han empezado a tomar con relación a la economía, permitirán ir gradualmente resolviendo estos problemas. Creo que hay una combinación que es muy peligrosa, desde el punto de vista político y social. Injusticia más la impresión, por parte de la sociedad, de que los gobiernos son indiferentes frente a la injusticia. Yo creo que ahora sí la sociedad percibe que está gobernando un partido que no cree que la solución de problemas económicas y sus consecuencias sociales se resuelven solo en el mercado.

Con respecto a lo que está sucediendo en Chile, situación que han seguido muy de cerca en Argentina, ¿cómo observa usted lo que ha sido el estallido social?

Con mucha preocupación. A mí no me sorprende, yo tenía información porque había leído libros de politólogos y sociólogos acerca de lo que estaba pasando con el sistema económico y sus consecuencias sociales en Chile. Sí me sorprendió el estallido que se produjo casi como un sismo, que nadie lo esperaba. Me preocupó mucho las noticias que llegaban respecto de ciertas actitudes de las fuerzas de seguridad que eran contrarias al Estado de derecho. Yo espero que los propios chilenos encuentren el camino pacífico hacia la solución de los problemas que ellos entienden que tiene la sociedad en términos de justicia y de igualdad.

El dirigente radical e hijo del exmandatario Raúl Alfonsín se distancia de la alianza de su partido con el del expresidente Macri. Frente al actual gobierno peronista, dice a La Tercera que se siente con un "intranquilo optimismo".