El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, cargó duramente hoy contra los defensores del Brexit, aumentando la presión sobre el incierto porvenir del acuerdo de divorcio, la víspera de la esperada visita de la primera ministra británica Theresa May.

"Me he estado preguntando cómo es ese lugar especial en el infierno para aquellos que promocionaron el Brexit sin siquiera un borrador de un plan sobre cómo llevarlo a cabo con seguridad", aseguró Tusk tras reunirse con el primer ministro irlandés, Leo Varadkar.

Las palabras del exprimer ministro polaco, quien suele pasar mensajes a Reino Unido pero no tan virulentos, muestran la exasperación en la Unión Europea (UE) después que el Parlamento británico rechazara un acuerdo que May y sus 27 socios habían aprobado.

Y todo ello cuando el escenario de un divorcio sin acuerdo, contra el que advirtieron las organizaciones económicas internacionales, gana fuerza a ambos lados del canal de la Mancha, a menos de dos meses del Brexit, previsto inicialmente para el 29 de marzo.

Tusk, que coordina las cumbres de mandatarios, subrayó en este sentido la importancia de evitar "un Brexit sin acuerdo" y dijo esperar de parte de la premier británica en su reunión de este jueves una "sugerencia realista sobre cómo poner fin al callejón sin salida".

El presidente del Consejo Europeo reiteró de nuevo la negativa de la UE a renegociar el acuerdo de divorcio cerrado y, en este contexto, un portavoz de la oficina de la premier británica cuestionó que el tono de sus palabras sea "útil".

El portavoz del partido unionista noirlandés DUP, Sammy Wilson, formación que sustenta la mayoría de May en el Parlamento, cargó así contra Tusk, a quien calificó de "maníaco diabólico de Europa", y defendió el referéndum de 2016 en el que venció el Brexit.