Los chilenos Felipe Osiadacz y Fernando Candia fueron sentenciados finalmente por la fiscalía de Malasia a dos años de cárcel, luego de que su causa fuera recalificada como homicidio culposo, y de cumplirse un buen comportamiento, los jóvenes podrían ser liberados en un mes.

Durante la audiencia que se realizó este jueves en Kuala Lumpur, Osiadacz y Candia se declararon culpable del homicidio de Yusaini Bin Ishak y se llegó a un acuerdo en la que se recalificaba el delito de asesinato a homicidio culposo.

Con ello los chilenos fueron condenados a dos años de presidio, de los cuales ya han cumplido el año y tres meses que han estado detenidos en el penal de alta seguridad de Sungai Buloh. Tiempo, el cual, se le restará de la condena.

De esta forma es probable que los chilenos queden en libertad en un máximo de nueve meses. Sin embargo el panorama puede ser aún más beneficioso para los chilenos.

Aún queda la probabilidad de que le rebajen a un tercio de la condena por buena conducta, por lo que los jóvenes podrían estar de vuelta a Chile en aproximadamente un mes y pasar Navidad junto a sus familias.

Sin embargo, hace quince meses, el panorama era completamente diferente. Los chilenos en Malasia arriesgaban a la máxima pena en el país por un homicidio. Felipe y Fernando se enfrentaban a la posibilidad de ser ejecutados en la horca por dar a muerte a un ciudadano malasio.

Pero fue la declaración de un policía, que acudió al hotel cuando ocurrieron los hechos, quien aseguró que la víctima falleció por falta de oxígeno y que se encontraba bajo la influencia de diversos estupefacientes al momento del ataque.

Estas pruebas fueron las que liberaron a Felipe y Fernando de ser sentenciados a la horca.

Más tarde, fueron las negociaciones entre la defensa y la fiscalía los que ayudaron a una calificación menor del delito. Frente a esto, la fiscalía propuso que los chilenos se declararan culpables a cambio de 30 años de cárcel, el cual fue rechazado por las abogadas defensoras Saraswathy Devi y Venkateswari Alagendra.

Finalmente, el día de ayer la fiscalía le propuso a la defensa de los chilenos recalificar el delito de homicidio a homicidio culposo el que se arriesgaban hasta 10 años de pena de cárcel, el cual fue aceptado este jueves.