Debido a que, en promedio, al año no se utilizan más de $ 280 mil millones destinados a mejorar la calidad de la educación de los niños más vulnerables, la Superintendencia de Educación decidió flexibilizar los criterios para focalizar de mejor manera la utilización de la Subvención Escolar Preferencial (SEP).

Según las estimaciones del Ministerio de Educación (Mineduc), el 28% de los recursos anuales destinados a la SEP no son gastados por los colegios, debido a que los usos definidos en la ley que creó esa subvención son interpretados de manera muy rígida.

El superintendente de Educación, Sebastián Izquierdo, indicó que "sin dejar de velar por el cumplimiento de la Ley SEP, estamos flexibilizando criterios específicos, como, por ejemplo, que determinadas remuneraciones y bonificaciones para los profesores o inversiones en mantención de inmuebles puedan ser solventadas con dichos recursos, en pos de mejorar la calidad de la educación".

El superintendente indicó que "hemos visto que la SEP tiene muchas restricciones para la utilización de esos recursos y como superintendencia tenemos la facultad de interpretar las leyes, en este caso la Ley SEP, y recientemente hemos entregado nuevas orientaciones a los colegios respecto del uso de esos recursos para poder mejorar la ejecución presupuestaria".

Una de las críticas que tenían los sostenedores, explicó Izquierdo, era que, por ejemplo, con los recursos de la subvención para niños vulnerables se podían comprar computadores que permitieran mejorar su aprendizaje, pero no existía la posibilidad de que los colegios construyeran una sala.

El presidente de Conacep, entidad que agrupa a colegios particulares subvencionados, Hernán Herrera, afirmó que "nos parece que esta flexibilización es un gran avance".