"Esto es un terremoto para muchos obispos en Chile, no sólo para los de El Bosque. Espero que el cardenal (Francisco Javier) Errázuriz sea el primero". Así se refirió ayer Juan Carlos Cruz, uno de los denunciantes del Caso Karadima, a la carta enviada por el Papa Francisco a los obispos del país. En la misiva, que se dio a conocer esta semana, el Pontífice pide perdón por los casos de abuso, respalda a las víctimas y convoca a los obispos a Roma, donde se proyecta que se tomarán medidas drásticas.

Cruz respondió así a las declaraciones del cardenal y arzobispo emérito de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, quien descartó que estuviera dentro de sus funciones, como miembro del Consejo de Cardenales, informar al Papa Francisco sobre la situación que afectaba a la Iglesia chilena y al obispo Juan Barros, y que además agradeció a los denunciantes de Karadima por "romper el silencio".

Según Cruz, "el cardenal Errázuriz falta a la verdad. Ahora tratando de hacer creer que él nos apoyó, pero a nuestro juicio nunca lo hizo", señaló Cruz.

A través de Twitter también respondieron a las palabras de Errázuriz los otros denunciantes de Karadima. "En lugar de asumir que fallaron, que traicionaron su rol y nuestra confianza, los obispos de Chile tratan de sacarse los balazos culpándose unos a otros. Triste espectáculo", escribió José Andrés Murillo.

Por su parte, James Hamilton recordó la carta que envió hace un mes atrás el arzobispo emérito de Santiago a varios presidentes de distintas conferencias episcopales de Latinoamérica, donde culpaba de algunas complejidades de la visita papal al protagonismo del obispo Barros y a las declaraciones de las víctimas de Karadima sobre ese tema.

"Este señor dice que no es el llamado a informar, pero leyendo carta que envió a los obispos de Latinoamérica parece que sí está llamado a desinformar", señaló Hamilton.

Ayer se confirmó que tanto Cruz, como Murillo y James Hamilton viajarán a Roma tras recibir una invitación del Papa Francisco. Según fuentes cercanas a los denunciantes, las reuniones están fijadas para el 28 y 29 de abril en la Residencia de Santa Marta, y permanecerían en el Vaticano hasta el 1 de mayo.

La invitación fue realizada mediante un llamado telefónico que realizó la semana pasada una persona de confianza del Pontífice y los denunciantes viajarán acompañados de su abogado.

Tras confirmarse la fecha en que los denunciantes viajarán a Roma, recibieron un importante mensaje privado de apoyo desde un alto personero del Vaticano.

Información

Sobre las palabras que entregó a La Tercera el cardenal Errázuriz, el obispo auxiliar de Santiago, Fernando Ramos, dijo que la entidad encargada de informar al Pontífice "efectivamente es la Nunciatura Apostólica, pero también hay mucha gente que puede entregar su opinión y puntos de vista".

El abogado canonista y vocero de Voces Católicas, Alejandro Álvarez, explicó que Errázuriz "tiene razón en que como arzobispo emérito de Santiago no tiene como función informar al Papa sobre los problemas de la Iglesia de Santiago, porque ya no es el arzobispo titular".

Sin embargo, añadió que "al ser creado cardenal de la Iglesia tiene no sólo una obligación por la diócesis en la que se encontraba hasta que fue arzobispo, sino que comparte la responsabilidad del Papa en toda la Iglesia".

Según explicó Álvarez, esta responsabilidad sería aún mayor, dado que Errázuriz pertenece al Consejo de Cardenales. "Reviste mayor responsabilidad aún ya que él es parte del denominado G9, que son quienes colaboran más estrechamente con el Papa. Por lo tanto, si bien no le cae una responsabilidad formal, él tiene la efectiva posibilidad de transmitirle al Papa la realidad de Chile".