El volante suizo Xherdan Shaqiri se tomó con buen humor la peculiar epidemia de camisetas rotas que afectó a su selección ante Francia, a la que no encontró una explicación pero sí un deseo: que el fabricante Puma no se dedique a producir preservativos.

"Es difícil de decir (la razón). Espero que Puma no haga condones", bromeó Shaqiri preguntado por la televisión suiza, después de que hasta en cinco ocasiones sus compañeros tuvieran que cambiar de camiseta por desgarros o agujeros.

Granit Xhaka, nuevo fichaje del Arsenal, lució torso hasta en dos ocasiones con una sonrisa estupefacta, mientras que sus compañeros Mehmedi, Dzemaili y Embolo también tuvieron que reemplazar sus camisetas.

El fabricante alemán de equipamiento deportivo no ha tardado en reaccionar ante la embarazosa situación, y aseguró hoy a medios franceses que sus equipos "están estudiando el tejido de las camisetas".

Sin embargo, matizó que los cinco equipos a los que surte de material en esta Eurocopa no han sufrido el mismo inconveniente durante sus partidos.

Por lo tanto, habrá que estar pendiente de los próximos partidos de Italia, Austria, Eslovaquia y la República Checa, todos ellos vestidos por el mismo fabricante, además, claro, de Suiza.

Pero Puma no fue la única marca malparada en el enfrentamiento. En un episodio realmente infrecuente, el balón "Beau jeu" de Adidas reventó cuando el suizo Behrami y el francés Griezmann acudieron al choque y pisaron la pelota.

En un comunicado, la marca alemana dijo que se encuentran sorprendidos por lo sucedido, que califican de "incidente extremadamente raro de ver".

"Estamos examinando lo que sucedió. La razón del desgarro todavía no ha sido identificada, pero 'Beau Jeu' ha sido muy elogiado por los expertos por su contribución al emocionante inicio de este torneo", señaló