Una de las 32 selecciones participantes del Mundial de Alemania 2006 fue Serbia y Montenegro. Amparados en su exitoso pasado, como Yugoslavia, tuvieron que enfrentar a Argentina, Costa de Marfil y Holanda, pero perdieron todos los juegos. Pese al magro registro, esa gesta marcó un hito: fue la última competencia bajo aquella denominación. La separación entre Serbia y Montenegro era efectiva.

El 21 de mayo de aquel año se efectuó un referéndum para la independencia de Montenegro, y el Sí ganó con un 55,5%, tras lo cual el nuevo Estado se proclamó el 3 de junio, seis días antes del inicio del Mundial. El torneo tuvo un país que, en rigor, no existía.

Cuatro años después, clasificó Serbia (ahora en solitario), siendo eliminados en primera fase. Al parecer, ahora es el turno de los montenegrinos, quienes son una de las gratas sorpresas en las eliminatorias europeas.

Los dirigidos por Branko Brnovic son líderes del grupo H, con 13 puntos, e invictos. La gracia es que, además de estar en zona de clasificación, superan a Inglaterra por dos unidades. Por lo mismo, adquiere gran importancia el choque de este martes en Podgorica entre ambas escuadras. En la formación titular hay elementos que no son desconocidos. Stevan Jovetic (Fiorentina) y Mirko Vucinic (Juventus) son las figuras.

Los buenos números no son casualidad. El presidente de su federación es una vieja gloria balcánica, Dejan Savicevic, ex figura del Milan ganador de la Liga de Campeones 1994, mundialista en Italia 1990 y Francia 1998.

No es el único

El ejemplo de Montenegro es replicable en otra selección europea, que nunca ha estado en la  primera línea.

Bosnia y Herzegovina estuvo a un paso de clasificar a Sudáfrica 2010 y a la EURO 2012, pero en ambas cayó en el repechaje ante Portugal. Ahora, el panorama se vislumbra distinto, ya que los bosnios son punteros del Grupo G, superando a dos mundialistas en 2010: Grecia y Eslovaquia.

El seleccionado, que nació en 1995 desde la ex Yugoslavia, tiene en Edin Dzeko al artífice de sus posibilidades. El delantero de Manchester City es el artillero histórico, con 27 goles, aunque además cuentan con una columna vertebral cuyo arquero fue conocido por Chile, pero defendiendo otra camiseta.

Asmir Begovic (Stoke City) es el meta bosnio, pero antes defendió a la selección Sub 20 de Canadá en el Mundial 2007, en aquel país. Precisamente, su debut en ese certamen fue ante la "Roja" de José Sulantay, con un triunfo chileno por 3-0.

En Asia, el "invitado de piedra" es Uzbekistán. Con la disolución de la Unión Soviética, los uzbekos debutaron oficialmente en 1992, y hasta ahora sólo se deben conformar con participar en la copa de su continente. Hoy, marchan en la cima del Grupo A, por encima de Corea del Sur e Irán. Su figura es Maksim Shatskikh, delantero del Arsenal de Kiev.