El piloto alemán Nico Rosberg se convirtió en el nuevo campeón de la Fórmula Uno, gracias al segundo lugar que obtuvo en el Gran Premio de Abu Dhabi, última fecha de la temporada 2016.

Rosberg, de 31 años, logró los puntos suficientes en el Medio Oriente y aguantó la arremetida final de Lewis Hamilton, que se quedó con la victoria en la carrera, su cuarta consecutiva en el año, aunque no le sirvió al británico para defender nuevamente el título.

A Rosberg le bastaba con terminar en el podio si Hamilton ganaba la carrera y eso sucedió. La carrera en los Emiratos Árabes se desarrolló sin mayores sobrsesaltos, aunque el trompo de Max Verstappen en la largada puso emoción. El holandés pudo remontar e incluso se puso segundo, pasando a Rosberg, que sufrió una mala parada en pits.

No obstante, en una arriesgada maniobra en la vuelta 20, Rosberg apeló a la potencia del Mercedes para recuperar el segundo lugar que tenía Verstappen, aunque con el tercer lugar de carrera también le bastaba para el título.

Rosberg apretó en la carrera y se acercó bastante a Hamilton para amenazar con un sobrepaso, pero fueron apenas escaramuzas y prefirió no arriesgar en pos del título.

Sin embargo, todo se complicó en las últimas vueltas de carrera. Hamilton bajó el ritmo y complicó a Rosberg, ya que Sebastian Vettel y Verstappen quedaron cerca del alemán, presionándolo. Incluso, el de Ferrari quedó a un par de décimas de Rosberg, pero no pudo sobrepasarlo. Al final, el de Mercedes pudo aguantar la intensa presión del Cavallino Rampante para ser segundo y firmar el título.

En su sexta campaña en Mercedes y su undécima como piloto, el hijo del finlandés Keke Rosberg, campeón de F1 en 1982, pudo superar a Hamilton, quien le había ganado en los dos años anteriores y logró el primer título de su carrera, que se negó dramáticamente en 2014 y que perdió sin apelación en 2015.

Durante 2016, Rosberg ganó nueve carreras y partió con cuatro triunfos al hilo, aunque en la mitad de la campaña perdió terreno a manos de Hamilton. Sin embargo, en una brillante arremetida después de las vacaciones del verano europeo, donde ganó cuatro de las cinco pruebas siguientes, recuperó el liderato del mundial, que no soltó hasta el final. Además, cosechó siete podios sin triunfos y siete poles.

Rosberg se convierte en el 33º campeón de Fórmula Uno de su historia y es el primer monarca nuevo desde que Vettel ganara el título en 2010 con Red Bull. De paso, es el tercer alemán en ganar el título (tras Vettel y Michael Schumacher) y el segundo caso de padre e hijo campeón, tras lo hecho por los británicos Graham y Damon Hill en 1962-68 y 1996.