SEÑOR DIRECTOR:

No hay peor estrategia que ocupar medidas transitorias para lidiar con problemas estructurales. Por ello, y aunque fue una ayuda clave para miles de mujeres en su momento, seguir extendiendo el posnatal de emergencia hoy puede precarizar aún más la empleabilidad femenina y seguir dilatando la discusión de fondo en torno a este tema.

Sin embargo, la suspensión del beneficio no debe oscurecer la nueva situación de dificultad que enfrentan miles de mujeres. La creciente inflación ahoga especialmente a las jefas de hogares monoparentales, a quienes les resulta indispensable contar cuanto antes con una fuente estable de ingresos; escenario que se complejiza debido a la falta de cupos en salas cuna o de redes de apoyo.

Por ello, a la vez que se revoca el posnatal de emergencia, la ley de sala cuna universal debiera ser prioritaria en la agenda del Ministerio de la Mujer. De lo contrario, equivale a abandonar a muchas madres a su suerte.

Gabriela Caviedes

Investigadora del Centro Signos U. Andes

Magdalena Undurraga

Licenciada en Filosofía