BC advierte sobre efecto de la violencia para continuar el proceso constituyente

En una exposición en Madrid, el vicepresidente del Banco Central, Joaquín Vial, alertó sobre los riesgos que podría provocar en la economía chilena el proceso de reforma a la Constitución si no se hace a través de un proceso ordenado. En este punto, dijo que "los disturbios públicos y actos de violencia resurgen, provocando incertidumbre sobre el proceso constituyente".

En ese sentido, añadió que "ha habido un shock muy grande e inesperado. Muchos temas en cuestión. La violencia generalizada ha tenido un impacto significativo en la confianza del público y los empresarios".

Pese a este problema, destacó a las políticas económicas "que han aminorado los impactos negativos de la crisis en el corto plazo, evitando la materialización de disrupciones mayores".

Sin embargo, reconoció que la economía se desacelerará drásticamente en 2020, y recordó que las proyecciones de crecimiento para este año se redujeron desde un rango centrado en 3,25% a uno centrado en 1%.

Explicó que los disturbios afectaron la actividad del comercio y algunos servicios, lo que provocó una caída significativa del consumo y la inversión. "De todos modos, en diciembre los registros de actividad dan cuenta de una recuperación algo más rápida que lo previsto en el último IPoM (Informe de Política Monetaria)", ya que mientras en octubre y noviembre el Imacec (Indice Mensual de Actividad Económica) cayó 3,4% y 3,3% respectivamente; en diciembre se observó una recuperación con un resultado positivo de 1,1%.

Aún así advirtió que la inflación podría saltar: "Durante el segundo y tercer trimestre del 2020, la inflación estaría cerca del 4%, mientras que la inflación subyacente aumentaría a poco más del 3,5% a mediados de año en respuesta a la depreciación del peso".

Para 2021, Vial pronostica "una recuperación modesta" aunque la estimación se mantiene bajo los niveles previstos antes del estallido social.

A su juicio, en el mediano plazo, "la variable crítica para el momento y la velocidad de la recuperación será la reducción de las incertidumbres. Esto cae en el ámbito de la política".

De todos modos, el consejero valoró la rapidez de las reacciones de política económica, "el sistema político ha funcionado razonablemente bien, después de un período inicial de gran confusión".

En cuanto a las reformas sostuvo que la nueva legislación que está en la mesa como la reforma a pensiones y la reducción de jornada laboral a 40 horas podría incrementar los costos (impuestos, costos laborales) con efectos adversos sobre el empleo, la inflación y la actividad.

En el lado externo, lamentó la emergencia del coronavirus: "La epidemia en China llega en un muy mal momento, justo cuando las exportaciones están proporcionando un soporte fundamental para la recuperación. Embarques de fruta, salmones y otros perecibles en camino están con problemas para descargar". Y en el lado interno prendió luces amarillas sobre los cambios que se avecinan y que podrían afectar la efectividad de las instituciones, y el sobreuso de los amortiguadores para absorber grandes shocks macroeconómicos.