Jorge Rodríguez Grossi, ministro de Economía: "No hay cambios trascendentales en juego en esta elección presidencial"

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El titular de la cartera celebra el despacho del proyecto de nuevo Sernac, cuestiona las críticas del sector privado y compromete medidas para agilizar la inversión. También apunta contra la encuesta del CEP por el retroceso de la abanderada de la DC, Carolina Goic.




"Feliz" se declara el ministro de Economía, Jorge Rodríguez Grossi. A comienzos de semana, el Congreso despachó el proyecto que otorga nuevas atribuciones y facultades al Sernac, iniciativa emblemática de la cartera y que está pronta a transformarse en ley luego de más de tres años de trámite legislativo. Sin embargo, Rodríguez Grossi pierde algo de esa alegría cuando se le consulta por los cuestionamientos que persisten desde el sector privado frente a lo que estiman un excesivo poder de la entidad. "Esas críticas las siento falsas", dice, argumentando que el texto aprobado incorpora una serie de cambios que dan a la normativa un carácter equilibrado.

Rodríguez reivindica el legado de la administración de Michelle Bachelet y desdramatiza el resultado de la próxima elección presidencial, en un contexto, dice, en que los factores externos apuntan a una recuperación de la economía chilena el próximo año. Eso sí, no pierde la oportunidad de considerar "rarísimo" y un "error evidente" el retroceso de la candidata de su partido (DC), Carolina Goic -y también de José Antonio Kast- en el nivel de conocimiento de la ciudadanía, según la última encuesta CEP.

-Supongo que en los casi dos meses que lleva en Economía esta debe ser una de sus mejores semanas, tras la aprobación del nuevo Sernac.

-Así es, es una semana feliz en términos de que se acabó un proceso y, por tanto, uno empieza a asumir otros. Efectivamente, fue uno de los temas centrales a los que me tocó abocarme, ya que el proyecto despertaba una serie de temores en el mundo productivo que creo sinceramente que los terminamos.

-Pero sigue habiendo críticas del sector privado.

-Claro, pero esas críticas las siento absolutamente falsas. Cuando llegué al ministerio, efectivamente había necesidad de hacer aclaraciones y algunos cambios, que los hicimos, y por lo tanto, cuando vuelvo a escuchar las mismas críticas de hace dos meses, me parece que no hay equidad en esas opiniones.

-¿Y a qué atribuye esos cuestionamientos?

-No puedo juzgar intenciones. Pero cuando hemos hecho un esfuerzo muy serio por dejar clarísimo que tiene que haber juicios debidamente hechos, que no puede haber arbitrariedades, que el director del Sernac va a ser una autoridad que tendrá que consultar a expertos y que las modificaciones de normas serán sujetas a discusión pública y que si alguien se siente injustamente afectado puede acudir a una Corte de Apelaciones, entonces uno dice bueno, qué más quieren. El director del Sernac será el que más vallas tendrá que pasar para demostrar que está actuando correctamente, y que además será elegido por Alta Dirección Pública. Entonces, no entiendo esas críticas, más aún cuando uno piensa que las buenas empresas lo único que pretenden es tener las mejores relaciones posibles con los clientes.

-¿A quiénes se está refiriendo exactamente?

-A los dirigentes que han aparecido en la prensa. Principalmente la Cámara Nacional de Comercio, la CPC y Sofofa. Todos criticando lo mismo.

-¿No se justifican esas críticas?

-No se justifican. Y además es malo pensando en lo que les he escuchado a estos dirigentes gremiales que están tratando de recuperar el prestigio de la empresa privada, que comparto es un buen propósito. Les hace mal en su legítima campaña del volver a colocar al mundo privado en el sitial que les corresponde dentro de una economía social de mercado. Este es un proceso extremadamente popular, y con justicia lo es. Hay mucha gente que se siente maltratada en algunos negocios, aunque en otros en que lo tratan igual de bien que en el mundo desarrollado. La economía de mercado no tiene en Chile lo que tiene en otras partes del mundo, porque no se porta bien. No todos, puede ser una minoría a lo mejor, pero que hace mucho daño.

-¿No hay un riesgo de instrumentalización política en las facultades que se dan al Sernac, que algunos califican de excesivas?

-Primero, no son excesivas. Se dice que este es un caso único, pero la verdad es que todas las superintendencias, para qué hablar del SII, tienen facultades similares a la del Sernac. Todas han tenido hasta ahora una sola jefatura históricamente, capaz de normar, vigilar, castigar, fiscalizar y ha funcionado bien. De hecho, originalmente el proyecto consideraba un consejo normativo, que fue retirado durante el trámite legislativo en la Comisión de Constitución del Senado. En este punto quisiera aprovechar de hacer un reconocimiento a la labor del ex ministro de esta cartera, Luis Felipe Céspedes, y también al ex ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, que se involucraron e impulsaron antes que yo este proyecto.

Pro inversión

-¿Diría que la del Sernac es la última gran reforma del gobierno?

-Creo que es posible despachar la Ley de Bancos, que está bastante avanzada, y hemos avanzado en bastantes consensos; la ley de privacidad de datos personales también es probable que salga y la otra aspiración que tenemos es una ley miscelánea en la que esperamos que los cambios que presentaremos sean ampliamente apoyados.

-¿Qué incluirá ese proyecto?

-No son solo cambios legales. En materia medioambiental, incluye cambios reglamentarios que vienen de las sugerencias que hizo la comisión asesora de la Presidenta Bachelet. Por ejemplo, si en un proyecto ya en marcha se descubre que una maquinaria opera mejor que la sugerida inicialmente, hoy es muy difícil y compleja esa modificación, entonces la idea es facilitar ese tipo de cosas. También en algunos casos se elevan los pisos para que los proyectos entren a evaluación, dependiendo de su tamaño.

-¿Qué más?

-La otra línea tiene que ver con las pequeñas empresas y el valor del dólar. Básicamente, estamos pensando en cómo ayudar a los pequeños exportadores para darles mayor estabilidad frente a la volatilidad del tipo de cambio. Las grandes empresas tienen cómo protegerse frente a esas volatilidades, pero las firmas más pequeñas no. Y junto a eso viene un conjunto de cambios, que sí requiere cambio legal, que apuntan a temas de propiedad industrial y simplificación de trámites.

-¿Es un compromiso del gobierno avanzar en estos temas?

-Así es.

Balance y escenario electoral

-A menos de un mes de la elección presidencial, ¿cuál es su mirada sobre el balance o el principal legado de este gobierno?

-Este es un gobierno cuya Presidenta ya lo fue antes en otra oportunidad, entonces el legado es más que el de una sola administración. Creo que si uno puede caracterizarlo, diría que este gobierno va a quedar muy marcado por reformas sociales muy importantes, en materia educacional, en salud. También las reformas sociales, por ejemplo, en materia de derecho de las mujeres. Probablemente va a quedar un recuerdo injusto en términos económicos, ya que a este gobierno le tocó pasar por el período más bajo del ciclo económico. La oposición les echa la culpa a las reformas, pero gran parte del bajón económico en este gobierno tiene que ver con la economía mundial.

-¿No tuvieron un impacto negativo las reformas?

-La situación externa está mejorando, lo que nos está llevando a tasas de crecimiento más altas, fundamentalmente por la recuperación de China. La oposición acusa que la reforma tributaria es la culpable y, obviamente, cuando uno sube impuestos para elevar la inversión social hay algunos proyectos que dejan de ser rentables, aquellos que están en el margen, pero si, además, se suma que una de las principales actividades, como la minería, enfrenta un mal período, obviamente hay proyectos que se caen. Eso se va a revertir ahora y vamos a disfrutar de un ciclo de expansión.

-¿El próximo año, entonces, será mejor independiente de quién gane la Presidencia?

-No diría gane quién gane, porque hay algunas diferencias no menores entre los candidatos, pero sin duda quienes tienen las principales chances no van a hacer cambiar la tendencia positiva que tiene la economía chilena.

-¿A quiénes incluye entre aquellos que tienen las principales chances?

-Prefiero no contestar eso.

-Sebastián Piñera es quien lidera hoy las encuestas con un discurso que apunta en sentido contrario a lo que usted dice, o sea, a revertir varios de los cambios que impulsó este gobierno…

-En las campañas se suelen agudizar las críticas, porque de lo que se trata es mostrarse distinto, así que no me extraña que los opositores al gobierno digan lo que están diciendo. Sin embargo, no conozco ninguna gran reforma que planee Piñera respecto del sistema económico, así que si llegara a ganar, Chile va a continuar siendo una economía de mercado abierta al exterior, con políticas macroeconómicas estables. Es posible que haya cambios de énfasis, pero desde el punto de vista de un inversionista no hay mayores cambios. No hay cambios trascendentales en juego en la elección presidencial. Eso es muy bueno.

-¿Hay un factor Piñera en el alza del Ipsa o en las mejores perspectivas del sector privado para 2018?

-Interesante, porque ayer (miércoles) salió la encuesta CEP y la información que tengo registrada es que el Ipsa cayó 0,7%. Es muy audaz hacer vaticinios de alza o caída de precios de las acciones por el triunfo de uno u otro candidato, cuando ninguno de los que tienen más posibilidades de ganar trae cambios estructurales, y me alegro que sea así.

-¿Beatriz Sánchez tiene posibilidades de ganar?

-Pocas posibilidades.

-¿No hay gran diferencia si la elección la gana Sebastián Piñera o Alejandro Guillier, por ejemplo?

-Hay diferencias, matices, pero desde el punto de vista de las grandes políticas, no vienen cambios estructurales.

-Así como el Sernac le dio buenas noticias, la CEP no lo debe haber dejado muy contento, luego del retroceso de Carolina Goic, por quien usted expresó su afinidad…

-Le encuentro toda la razón a Carolina de que es bastante insólito que después de varias semanas de campaña, aparezca con un porcentaje de conocimiento menor al de antes. Lo mismo le escuché al diputado José Antonio Kast, con el mismo argumento, y le encuentro toda la razón. Es rarísimo que la CEP le asigne a Carolina menor conocimiento.

El valor de las encuestas políticas está en duda en todo el mundo, porque la gente no siempre dice la verdad, no siempre contesta y, por lo tanto, están con grandes signos de interrogación. Después veremos si esta encuesta se acercó a la verdad. Creo que en el caso de Goic y Kast, la CEP tiene errores evidentes, porque no es verdad que son menos conocidos que antes.

-La candidata habló derechamente de colusión de las encuestas…

-No quiero entrar en ese plano.

-¿Cuáles son sus planes después de marzo?

-El próximo semestre vuelvo a hacer clases, y espero retomar mi decanato en la Facultad de Economía de la Universidad Alberto Hurtado.

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