Manifiesto: Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso

Jorge SharpAlejandra Chellew Bulnes
Jorge Sharp, alcalde de Valparaiso Fotografia: Marcelo Segura Millar

"No creo en el capitalismo, pero tomo Coca Cola. Quiero que Estados Unidos se hunda, pero tengo dos iPhone y a veces voy al McDonald's. Ese es mi placer culpable".




La fama ha sido difícil. Sé que es una consecuencia de lo que hago. Es una cuestión incómoda, muchas veces termino exponiendo a otras personas que no eligieron este camino. La familia, amigos, pareja, todo se resiente un poco.

Al terminar el colegio quería salir de Punta Arenas y empezar de nuevo. Llegué a Valparaíso porque me alcanzaba el puntaje y había un grupo de amigos que también venía a estudiar. Mis objetivos en la universidad eran hacer política y música. En los primeros años extrañé, pero quería conocer otras realidades. Estoy enamorado de la ciudad, no volvería al sur. No fue un amor a primera vista, sino que fue un amor trabajado. Y esos son los amores que más duran.

Iba a tomar leche con plátano a la casa de Gabriel Boric. Nos conocimos en medio del proceso de reconstrucción de la Federación de Estudiantes Secundarios de Punta Arenas. En ese tiempo chateábamos por una cuestión muy antigua, el IRC. Pensábamos parecido y me interesaba hablar de política con él. Luego, en la universidad nos encontramos militando en la misma organización sin ponernos de acuerdo.

Gabriel Boric es bueno para la piscola, yo ahora prefiero la michelada. Hace dos meses me hice fanático. También me gusta el campari con hielo y una torreja de naranja. Nunca he sido de carretear tanto, si de salir a pubs a tomar algo, a escuchar música o de reírme de puras tonteras. Pero ya no puedo hacer eso. Si tomo, prefiero hacerlo en mi casa.

No me obsesiona ser presidente de Chile. Me veo como parte de un grupo de personas que en algún momento va a tener la oportunidad de hacerse cargo del gobierno de este país. Estoy dispuesto a asumir cualquier responsabilidad. Para mí, la política tiene que ver con cuestiones colectivas, con procesos donde hay mucha gente involucrada.

Si esta municipalidad fuera una empresa, yo sería el síndico de quiebras. Es brutal, son muchos millones los que se le deben a la ciudad. La principal arista es la deuda previsional que tiene la ciudad con los profesores.

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Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso. Foto: Marcelo Segura Millar / La Tercera

Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso. Foto: Marcelo Segura Millar / La Tercera[/caption]

No me considero una persona talentosa. No es falsa humildad. Me saqué la cresta para ir mejorando, con mucha disciplina, esfuerzo y perseverancia. Eso me ayudó a estar donde estoy ahora.

Tener hijos de la Concertación en el Frente Amplio es una virtud. Esos compañeros por tradición apuntaban a una dirección y tras un análisis político se han dado cuenta de que el camino es otro. El verdadero problema está en decir que somos solamente eso. El análisis sobre nuestra composición tiene que ser mucho mayor.

No creo en el capitalismo, pero tomo Coca Cola. Quiero que Estados Unidos se hunda, pero tengo dos iPhone y a veces voy al McDonald's. Ese es mi placer culpable.

Mi arma de seducción es el don de la palabra. En el colegio me iba mal con las mujeres, era inseguro y vergonzoso, sentía que era feo. A los 16 años fui presidente del Centro de Alumnos y eso me hizo crecer. Cuando entré a la universidad empecé a conocer más gente y me empezó a ir mejor.

Alberto Mayol es un líder intelectual, pero el Frente Amplio necesita un referente ciudadano. De acuerdo al escenario político en el que estamos, creo que el liderazgo de Beatriz Sánchez y su discurso corresponden más a nuestros objetivos. Alberto Mayol representa una visión y una parte importante del conglomerado, él debería seguir en primera línea.

Los progresistas de la ex Concertación están bien lejos del legado de Salvador Allende. Usaron el error que reconoció Beatriz Sánchez para criticarla y no para abordar el tema de fondo. Si están tan interesados en conversar sobre el legado de Allende hay que hacerlo seriamente y comparar si es que las orientaciones del ex presidente se expresaron con claridad en los años de gobierno de la Concertación.

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