Documento del FA fija ejes para resolver diferencias y rol opositor

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La excandidata presidencial del Frente Amplio Beatriz Sánchez, ayer en Villa Grimaldi, junto a los diputados RD Maite Orsini y Miguel Crispi.

Desde la mesa nacional se acordó hace dos semanas iniciar un periodo de reflexión para discutir estos temas. Este proceso, según dirigentes del bloque, cobró más importancia luego de los últimos conflictos internos.


Con miras al futuro congreso ideológico y un nuevo orden dentro del conglomerado, la mesa nacional del Frente Amplio convocó a través de una carta el pasado 7 de junio a un proceso de reflexión, de 30 días de duración, a todos sus partidos y movimientos políticos.

El objetivo del documento es discutir, entre otras cosas, el rol de la coalición en la oposición, en el Congreso Nacional y en los movimientos sociales. Además, este proceso, que terminará con una jornada de trabajo, busca concluir cómo se debe ordenar la orgánica del Frente Amplio, su modo de resolver los conflictos y su relación con los partidos fuera del conglomerado.

Según distintos dirigentes del sector, este periodo de reflexión toma especial relevancia luego de los últimos roces internos que han complicado al Frente Amplio, entre ellos, la polémica entre el Movimiento Autonomista y Revolución Democrática, y el fracaso de la acusación constitucional contra el ministro de Salud, Emilio Santelices.

"El Frente Amplio valora la diversidad que lo integra, ya que constituye el reconocimiento de que, más allá de legítimas diferencias, hay un desafío mayor que requiere de la convergencia, unidad y creatividad de un amplio sector de nuestra sociedad", dice el documento con el que concretaron el inicio de esta nueva etapa.

"Ese desafío no se enfrenta ignorando la existencia de distintas perspectivas, ni buscando pegar siglas de organizaciones políticas y sociales, sino que requiere de un debate franco y leal de ideas, que enfrente las diferencias para construir acuerdos", añade el texto.

El documento, además, detalla que cada una de las colectividades se propone "profundizar y precisar la propia mirada, para posteriormente, en un diálogo fraterno, intercambiar sobre esas visiones y dotar así de un marco político la convocatoria al congreso previsto del Frente Amplio, instancia que será el espacio de convergencia entre todos sus componentes y de resoluciones conjuntas".

Desde Poder, de hecho, su secretario general, Andrés Hidalgo, explicó que "la jornada de trabajo de la mesa nacional será fundamental para tomar definiciones claves de cara a la coalición que aspiramos construir. Ya no se trata solo de ganar una elección, ahora el desafío es liderar la oposición".

Luis Felipe Ramos, presidente del Partido Liberal, en tanto, cree que "el crecimiento explosivo del Frente Amplio nos demanda mayor reflexión desde los partidos. Buscaremos llegar a una mejor coordinación, más simple y participativa".

Pero la discusión no es nueva. Hace casi dos meses que la mesa nacional, según cuentan fuentes que participan de este espacio, comenzó a cuestionar el rol que estaban cumpliendo dentro de la coalición. Esto, en medio de la polémica por la participación de militantes del Frente Amplio en las comisiones citadas por el gobierno, en el marco de los acuerdos nacionales, lo que evidenció un desorden al interior del bloque.

Fue en medio de este debate que Revolución Democrática (RD) hizo una propuesta: crear una mesa, en la que participaran cinco de las fuerzas del bloque, para que tomara las decisiones del día a día a nombre del conglomerado. A esto se sumaba una asamblea mensual con la participación de las 14 fuerzas, más los grupos territoriales.

Esta idea tuvo un apoyo mayoritario, puesto que muchos diagnosticaban que era necesario un espacio más ejecutivo para darle mayor conducción al Frente Amplio. Sin embargo, nunca se llegó a acuerdo en cómo decidir quién integraría ese grupo más acotado, y nadie quiso quedar fuera del espacio.

Ahora, la reflexión del bloque vuelve a tomar fuerza. "Los sucesos de las últimas semanas reafirman lo que hemos dicho desde hace meses: necesitamos fortalecer el Frente Amplio y sus espacios de discusión y toma de decisión", señaló el timonel de RD, Rodrigo Echecopar.

En la misma línea, la secretaria general de Izquierda Autónoma, Valentina Saavedra, dijo que "luego de estos 'hitos', pero sobre todo luego de este tiempo siendo parte de la oposición, donde nos ha costado como coalición tener una dirección clara, urge trabajar en propuestas y prioridades para enfrentar con unidad la construcción de una oposición".

Octavio González, presidente del Partido Humanista, sostuvo que "como no se ha hecho esta reflexión de cómo pensamos el Frente Amplio, no hay dónde consultar las decisiones del conglomerado", lo que ha producido algunos de los conflictos del bloque. "Los territorios están llenos de militantes y no de organizaciones sociales ni de independientes", acusó.

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