En las oficinas de Canal 13, a Carlos Pinto se le acerca un ex-participante de MasterChef para profesarle admiración y contarle que cuando chico escuchaba sus programas de TV por la radio, ante la ausencia de señal en el extremo sur. Una escena como esa no es extraña para Carlos Pinto, acostumbrado a que lo paren en la calle para saber cuándo vuelve o que, como le pasó hace poco, lo busque un grupo de fanáticos que por Facebook intercambian material y le han pedido reunirse con él, cual fan club.

El animador marcó una época con sus programas sobre crímenes truculentos y hechos paranormales, que reventaron el rating y crearon escuela. Esto último, principalmente debido al particular estilo que tenían sus ficciones basadas en casos reales, abordadas con eficiencia narrativa y un tono sombrío, deliberadamente dramático y exagerado, como esas apariciones suyas en la mitad de un capítulo hablándole a la cámara, siempre en tres cuartos de perfil. Marcas registradas inolvidables, tal como el brumoso humo de la presentación de sus programas.

Su sello regresará este lunes cuando se estrene Irreversible, el programa que lo vuelve a poner en órbita, tras su renuncia a TVN en 2013 y tras un paso de dos años por MEGA donde no pudo materializar ningún proyecto. Irreversible ya en su programación presenta novedades respecto a los espacios que hizo para TVN: irá a las 8 de la noche y "en franja", es decir, de lunes a viernes.Es la primera vez en más de dos años que Canal 13 tendrá programación propia en la franja vespertina.

Pinto cuenta que se entusiasmó porque el canal le presentó una manera de refrescar lo que ha hecho siempre. "Si uno es un cantante pop y ha dejado de cantar por algunos años, al volver la gente quiere escuchar los hits. Pero también volver sólo con eso es poco. Entonces tienes que conservar tu estilo y tener temas nuevos, y eso es desafiante".

El programa será sobre casos policiales, pero dice que hay varias diferencias de contenido con el clásico Mea Culpa: una es un mayor énfasis en lo que rodea al hecho criminal, sin quedarse mucho en los delitos mismos, y otra es que será sobre gente común y corriente, sin antecedentes penales. "Todas las personas que son protagonistas de estas historias por primera vez cometen un delito. Es decir, es un programa policial sin recurrir a la cárcel. Nuestra gran propuesta es comunicar que cualquiera puede cometer un delito y ver qué pasa con los individuos que en un momento deciden dar un paso adelante, irreversible".

Como es habitual, Pinto no sólo será el rostro, sino que también el guionista y director. "Es impresionante", dice al respecto Sergio Nakasone. "Es de esos profesionales que cada vez escasean más en la tele". El productor ejecutivo, célebre por los reality shows, cuenta que siempre admiró al periodista. "A mí me tocó llegar el 2003 a Chile y acá el amo del rating era Carlos, así como en Argentina era Marcelo Tinelli. Por suerte pocas veces me tocó competir con él, si no hubiera perdido".

La idea de traerlo de regreso, dice Nakasone, surgió hace un año, cuando buscando novedades programáticas diversos grupos de su equipo presentaron el género policial como uno que podría regresar, junto al nombre de Carlos Pinto. "Lo empezamos a testear dentro del canal y la respuesta siempre era que, claro, este género tiene una reminiscencia con Carlos y que se le extrañaba. La gran idea nuestra fue traerlo de vuelta en un formato y horario distinto. Después el resto es aggiornarlo, porque para mí es un gusto y un honor poder trabajar con él".

Vocación audiovisual

Pinto lleva tanto tiempo involucrado con este tipo de historias que a veces pareciera un experto en criminología. Se aventura en explorar las causas de homicidios o utiliza una particular imagen para rastrear el origen de un crimen: "Alguien comete un crimen un determinado día, y tiras un elástico hacia atrás en el tiempo hasta que en algún momento se va a detener, cuando entendemos que el crimen empezó a fraguarse".

Pero pese a que Irreversible contará casos inspirados libremente en hechos reales, consultado sobre su vínculo de tantos años con el género policial, responde que tiene que ver más con la ficción que con la realidad.

"Soy director, soy un hombre audivisual. Por lo tanto mi postura de hacer programas de miedo o terror está en función de la capacidad de esas historias de generar sensaciones en el espectador. No es que me guste la crónica roja. Es más, cuando la veo en la TV creo que la eludo. Soy esencialmente un realizador y me interesan no las muertes, sino lo que conllevan, poder aprender yo y que aprendan otros.

Sergio, ¿cuáles son tus expectativas de audiencia?

El proyecto mismo superó mis expectativas, algo que, por la exigencia que tenemos como equipo, nos pasa muy pocas veces, así que debería irnos bien. Cuando vi los primeros capítulos llamé a Carlos eufórico, porque el producto me ubicó muy fuerte en la posición del espectador. Pero independiente de cómo nos vaya, eso no va a cambiar mi percepción de que es un producto realmente hecho para la TV de hoy.

Vuelve luego de cinco años, Carlos. ¿Qué ha cambiado en la TV?

No son muchos años. Y en la TV lo que ayer fue éxito hoy podría no serlo, o al revés, de modo que a mí no me ampara el éxito. Siempre he dicho que no conozco el camino del éxito, pero sí el del fracaso, que no es otro que tratar de darle en el gusto a todos. La TV cambia todo el tiempo y vamos a estrenar con humildad, pero confiados en que el público se va a entretener. En que el programa será como un espejo donde la gente se verá reflejada.