Muere el pianista Ellis Marsalis, el patriarca de los "jóvenes leones"

Ellis y Wynton
El pianista Ellis Marsalis y su hijo, el famoso trompetista Wynton Marsalis.

El padre de Wynton y Branford Marsalis falleció por complicaciones de coronavirus a los 85 años. También habían muerto en los últimos días y por la misma enfermedad el trompetista Wallace Rooney y el saxofonista Manu Dibango.


El coronavirus ha sido hasta ahora un verdugo implacable con algunos de los estandartes del jazz. Este martes murió en Nueva Jersey el trompetista Wallace Roney, tal vez el único real protegido de Miles Davis, y una semana antes había fallecido en París el músico camerunés Manu Dibango.

Este 1 de abril, además, murió el pianista y pedagogo Ellis Marsalis, padre del trompetista Wynton Marsalis y del saxofonista Branford Marsalis. El patriarca de un clan musical donde hay otros dos jazzistas tenía 85 años y vivía en su ciudad natal de Nueva Orleans (Louisiana), de acuerdo a una declaración pública de su hijo Wynton Marsalis.

La ironía del negocio musical y del sentido de la oportunidad quiso que Ellis Marsalis se hiciera realmente conocido en los años 80, al mismo tiempo que sus muchachos Wynton y Branford, y cuando andaba ya alrededor de los cincuenta años. Durante sus primeros años tocó con algunos de los mejores, destacando los hermanos Cannonball y Nat Adderley, pero también tempranamente descubrió que como profesor era infalible.

Ellis Marsalis despertó la curiosidad de varios alumnos inquietos y fue la figura tutelar de la generación llamada de los "jóvenes leones", un grupo de músicos que buscaba retornar a las raíces del jazz acústico de los 50, cuando surgieron el saxofonista Charlie Parker y el pianista Thelonious Monk, dos ídolos de Ellis Marsalis. El bebop era su Biblia y se la enseñó a Wynton y Branford, hermanos inmensamente talentosos, líderes de un grupo de intérpretes a la vieja usanza donde también están el compositor Terrence Blanchard (autor de las bandas sonoras de las películas de Spike Lee) y el cantante Harry Connick Jr.

Un dato curioso en la carrera de Ellis Marsalis es que él mismo, predicador de las viejas costumbres del bop, fue un rupturista en una ciudad demasiado aferrada a las tradiciones: su estilo anclado a los revolucionarios años 50 no era bien recibido en su natal Louisiana, donde la tradición era tocar como el trompetista Louis Armstrong y el saxofonista Sidney Bechet, auténticos hijos ilustres de Nueva Orleans.

Durante toda su vida, Ellis Marsalis suscribió los principios de la rigurosidad y el estudio, características que lo hicieron un gran maestro, pero en ningún caso un profesor temible entre sus estudiantes. Por el contrario, según su hijo Wynton, Ellis Marsalis era demasiado "cool" para exigir a través de rabietas.

"Nunca me presionó. No era ese tipo de persona. La casa podría haber estado arruinada y todo en el suelo, y mi padre iba a seguir sentado en la misma silla de siempre", comentaba Marsalis hijo en una entrevista con The New York Times en el 2004.

A diferencia del virtuosismo desbordante de Wynton Marsalis, su padre mantenía un estilo "impresionante por su economía y estabilidad" escribía Stephen Holden en 1983 en The New York Times.

https://www.youtube.com/watch?v=CdXp2fFC3wU

En el grupo de los virtuosos se ubicaba el trompetista Wallace Roney, muerto el martes pasado a los 59 años. Fue el único real protegido de Miles Davis, quien alguna vez le dijo que le recordaba a él mismo cuando en los años 50 aprendía del trommpetista Dizzy Gillespie. Aunque en sus inicios muchos simplemente lo consideraron un clon de Davis (tocó junto a él en sus últimos conciertos), Roney desarrolló una personalidad musical propia donde mezcló jazz, funk, hip hop, ritmos afrocubanos y pop.

Al otro lado del Atlántico, el saxofonista, vibrafonista y compositor camerunés Manu Dibango murió a los 86 años el 24 marzo después de estar ocho días internado en un hospital de París. Dibango se hizo conocido en los años 70 con su hit Soul Makossa, mezcla de jazz, ritmos africanos y música disco. También trabajó en bandas sonoras y colaboró con artistas provenientes de una gran cantidad de géneros desde el cantautor francés Serge Gainsbourg hasta el grupo cubano Cuarteto Patria, con el que en 1988 grabó el disco CubAfrica.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.